
“En ese Consejo -agregó Rajoy- se adoptaron una serie de decisiones y nosotros lo que queremos es algo tan elemental como que esas decisiones se cumplan”. “Antes de que termine este año tendremos que haber dado pasos en materia de unión bancaria y de supervisión bancaria para transmitir un mensaje de que cumplimos nuestros compromisos”, ha añadido.
En este sentido, ha insistido en que “es plenamente posible y absolutamente deseable que el Consejo Europeo dé una señal nítida y clara de que continúa con determinación el proceso de integración europea. Y se puede empezar con la supervisión bancaria, el encargo al BCE” y la aprobación en el mes de diciembre de un reglamento que entre en vigor a principios de 2013.
FMI y UE
Respecto a las últimas previsiones de crecimiento publicadas por el Fondo Monetario Internacional, el jefe del Ejecutivo ha reconocido que “no son satisfactorias para España”, pero “tampoco” para ningún otro país de la Unión Europea. “Mi objetivo será que no se cumplan y que se cumplan las que ha hecho el Gobierno de España”, ha agregado, al tiempo que adelantaba que su equipo había pronosticado para este año una rebaja del PIB del 1,7% y que probablemente el resultado final sea mejor.
En todo caso, el presidente del Gobierno ha recalcado: “A mí estas previsiones del FMI para lo que me sirven es para tomar decisiones a nivel de Estado -control del déficit público y reformas estructurales- y a nivel de toda Europa de tres tipos, que son las que tomamos en el Consejo Europeo del mes de junio: las reforma estructurales que están contenidas en el plan de crecimiento que aprobamos allí, la resolución de los problemas de liquidez de la zona euro de una manera clara y entendible y el avance hacia la unión bancaria, fiscal, económica y política. Por lo tanto, si avanzamos en la senda marcada por el Consejo Europeo de junio, habremos dado un avance muy importante para que la realidad sea mucho mejor que las previsiones que han hecho algunos organismos internacionales”.
Por lo demás, Rajoy ha abogado por que Grecia permanezca dentro de la zona euro, ya que su salida “haría palpable un fracaso colectivo de toda la UE que no nos podemos permitir”. En todo caso, ha precisado que este país debe cumplir sus compromisos, “como hacemos todos”.
Fondos de cohesión
El jefe del Ejecutivo ha adelantado, además, que Madrid y París defenderán ante la Unión Europea el mantenimiento de las políticas de cohesión que “apoyen las reformas estructurales a las regiones con dificultades para alcanzar su crecimiento potencial y a las regiones ultraperiféricas”, así como el mantenimiento de la PAC, de forma que “permita asegurar el crecimiento, el empleo, el medio ambiente y la innovación” en el medio rural.









