Si bien ahora se reveló que dos mayores serían los responsables del asesinato de la niña de 11 que fue violentamente atacada para robarle su teléfono celular, unos menores de edad estuvieron involucrados y uno de 14 años se autoincriminó para salvar – presumiblemente obligado – a los verdaderos responsables del crimen, porque, según las leyes, un menor no puede ser condenado por un delito.
El clamor ante la grave inseguridad en el país, muestra el fracaso del gobierno en el combate a la delincuencia y el precandidato presidencial de Unión por la Patria y ministro de Economía, Sergio Massa, afirmó este miércoles que el crimen de la niña de once años en Lanús es la “clara muestra de que hay que poner el acento en la lucha contra la inseguridad”, y se mostró a favor de un nuevo régimen penal juvenil entre los 14 y los 18 años.
Pero este pedido de bajar la edad de imputabilidad a los 14 años, es un proyecto de ley que siempre ha defendido la precandidata opositora Patricia Bullrich, la cual fue cuestionada por su iniciativa, que ahora encuentra eco en el kirchnerismo, ante el cúmulo de acciones delincuenciales protagonizadas por menores.
Massa, como otros precandidatos, también canceló su cierre de campaña ante la conmoción que generó el crimen de Morena Domínguez, asesinada pro motochorros cuando iba a la escuela. El caso irrumpió en la agenda pública a solo cuatro días de las PASO, y el clamor por seguridad se renueva en el conurbano caliente.
Consultado sobre la edad de imputabilidad, Massa aseguró que él tiene una postura “pública” que es que entre “los 14 y los 18 años hace falta un nuevo régimen penal juvenil”.
Los acusados del horrendo crimen
Miguel Ángel Madariaga, de 28 años, y su hermano Darío Humberto, de 25, son los principales sospechosos por la muerte de la niña. Los dos poseen antecedentes penales y el mayor de ellos ya tiene una condena por robo.
