El Parlamento Europeo aprobó un acuerdo, en que específica que transferirá los datos a largo plazo de sus pasajeros, a los servicios de inteligencia de los Estados Unidos con el objetivo de combatir el terrorismo.
La medida será aplicada a los pasajeros que realicen viajes trasatlánticos, y fue aprobada tras diversos debates, referentes a la protección de datos de unos 48 millones de pasajeros, que viajan anualmente entre ambos continentes.
La transferencia de datos “ha ayudado a prácticamente todas las investigaciones estadounidenses sobre terrorismo en los últimos años”, argumentó el embajador de Estados Unidos ante la UE, Williams Kennard.
Entre los datos obtenidos durante el procedimientos de reservas y chequeo para un viaje, se destacan el nombre, dirección, número de teléfono, detalles de las tarjetas de crédito, agencia de viajes, equipaje y número de asiento de cada pasajero, además resalta los calificados como “información sensible”, relacionada a la elección religiosa de una comida o pedido de ayuda ante problemas médicos.
Los parlamentarios europeos renegociaron el tratado transitorio suscritó el 2007, el que fue rechazado de plano en 2010, por lo que fue necesario estrechar las posturas entre Bruselas y Washington en un nuevo acuerdo, que avale mayores garantías en materia de respeto a las libertades individuales y a la vida privada de las personas.
En la misma línea trascendió, que los datos sólo serán usados con fines para combatir el terrorismo o los crímenes graves.
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