Fracaso del ‘simulacro electoral’ de Maduro que intentó empañar el plebiscito opositor

El régimen chavista cuando conoció la fecha del 16 de julio que eligió la oposición para realizar el plebiscito para que los venezolanos opinaran democráticamente si estaban o no de acuerdo con el proyecto de una ilegal Asamblea Constituyente, anunció que el mismo día se haría un “simulacro electoral” para probar las máquinas captahuellas que utilizará el fraudulento Consejo Nacional Electoral (CNE), el 30 de julio.
Unos pocos miles de personas acudieron al llamado del gobierno; una cifra que -se descarta- será magnificada por el CNE que dirá que acudieron millones, para no dejar en evidencia el fracaso.
Tal es así, que el régimen ordenó que autobuses custodiados fueran a las empresas públicas que trabajan en domingo, a obligar a sus funcionarios a que acudieran al “simulacro electoral”.
Pero eso no fue todo; ante el fracaso y para evitar que los medios vieran la escasa concurrencia que convocó el fallido simulacro de elecciones, mantuvieron de plantón en los circuitos durante horas a los pocos participantes que fueron al “ensayo” del régimen.
Maduro dijo que “Es el mismo Poder Electoral con su capacidad tecnológica e institucional y es el mismo pueblo. El pueblo salió como un mar gigantesco, como un río crecido de pasión y amor (…)”, claro que el pueblo fue un mar gigantesco pero para dar su voto en contra de la Constituyente de Maduro.