En Uruguay, la aprobación de la ley que despenaliza el aborto por parte de las Cámaras Legislativas, llevó a muchos ciudadanos y organizaciones sociales que defienden el derecho a la vida, a interponer un recurso legal previsto en la Constitución, para habilitar una consulta popular que lleve a un referéndum que en caso de aprobarse por mayoría de votos de la gente en las urnas y de forma democrática, anularía la ley.
En la concreción de esta primera etapa, se logró la cantidad de firmas necesarias de los ciudadanos para comenzar con la primera etapa de la consulta popular que se cumplirá este domingo 23 de junio.
Esto provocó el ataque masivo de los defensores de la ley que despenaliza el aborto hacia quienes tienen el derecho legítimo de pensar diferente. Muchos personajes públicos a favor del referéndum realizaron campaña pública y fueron agraviados con dureza por quienes defienden la ley que despenaliza el aborto, en una actitud totalitaria que no habla muy bien de sus sentimientos democráticos.
Los ataques parten en su mayoría de personas que sintonizan con el gobierno que defiende la ley, pero lo hacen apelando al atropello en lugar de tratar de convencer a los votantes con argumentos.
La presentadora de televisión Sara Perrone, fue víctima-entre otros- de esa intolerancia y declaró en el diario El País de Montevideo que recibió “muchos palos”, pero los soportó. “Sabía que iba a pasar, que iba a tener muchas críticas porque este es un tema muy polémico, con posiciones muy encontradas”, añadió. También destacó que muchos la felicitaron por su participación y compromiso. “No todo fueron palos. También recibí mensajes de gente que valoraba estar en la campaña”, dijo la comunicadora.
La situación es de tal tensión que los obispos exhortan a votar
Los obispos de la Iglesia Católica reiteraron en estas horas una declaración difundida el 13 de noviembre pasado: “Los derechos humanos y este primordial derecho a la vida no pueden quedar sujetos a mayorías circunstanciales de un cuerpo legislativo o electoral. Sin embargo, ante la situación que se ha creado, sigue siendo el deber de los laicos católicos y de los hombres y mujeres de buena voluntad aportar sus esfuerzos para procurar que nuestra legislación respete el derecho a la vida humana desde su concepción. Quedando en manos de los ciudadanos la elección de los medios que estimen oportunos, alentamos las iniciativas legítimas que busquen la derogación de esta ley”, señalan.
También agregan: “los uruguayos tenemos ahora la oportunidad de cambiar con nuestro voto el rumbo de las cosas y darle un sí a la vida de los niños, lo que nos permitirá mirar con esperanza nuestro futuro como nación”.
“El derecho a la vida no puede nunca ser objeto de un referéndum, desde el momento que proviene de Dios. Sin embargo, ante esta ley injusta, dado que nuestra Constitución prevé que los ciudadanos puedan expresar su voluntad de derogarla, exhortamos a votar el próximo domingo 23”, concluye la declaración de los obispos.
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