En los corrillos políticos españoles ya se habla de la peligrosa ambición personal del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que se aferra al sillón de mando, no acepta consejos y sigue con la idea fija de ser la alternativa al gobierno de Rajoy con tan solo 85 diputados para lo cual ya se teme que igual pactará con populistas e independentistas.
Consideran sus detractores que si el PSOE no le frena, Sánchez terminará cargándose a España con su intolerancia.
Según informa El País, las federaciones socialistas trabajan para impedir que el comité federal del próximo sábado lleve a votación la convocatoria de un congreso y de primarias a la secretaría general el 23 de octubre.
Según el periódico español, el freno a las intenciones de Sánchez pasaría por la dimisión de 18 miembros de la ejecutiva del PSOE, la mitad más uno, lo que llevaría a la extinción de ese órgano, su sustitución por una gestora y la salida de Sánchez.
Amenazas de renuncias si se pacta con independentistas
El presidente de la Junta de Extremadura, el socialista Guillermo Fernández Vara, ha señalado que “probablemente abandonaría el PSOE” si Sánchez pacta con independentistas y puntualizó que “en ningún caso podemos gobernar con aquellos que quieren plantear un proceso de separación de España, ahí es donde se produce la principal discrepancia”, con Sánchez, dijo en la Cadena COPE.
También ha pedido “coherencia y responsabilidad” a la dirección socialista porque “lo importante es que haya gobierno. Si se quiere que haya una alternativa al PP, hay que ganar las elecciones. No se puede bloquear, hay que gobernar o dejar gobernar”.