Por Raúl Vallarino.
Nunca fueron defensoras de derechos humanos, aunque se disfrazaban con pañuelos blancos e intentaban dar lástima reclamando por las arbitrariedades de la dictadura militar, con los secuestros y desapariciones de opositores, pero en el fondo todo era un negocio que les reportaba millones amparadas por los gobiernos kirchneristas.
En realidad unas simples estafadoras y recordemos a la presidenta de las Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini; a los hermanos Sergio y Pablo Schoklender, ex apoderados de la entidad; a José López, ex secretario de Obras Públicas, y a otros funcionarios de esa área durante el kirchnerismo terminaron procesados por fraude contra el Estado en 2017 al contratar la construcción de viviendas sociales sin licitación por casi $ 1250 millones. De esa suma, las Madres cobraron $ 749 millones, pero 206 millones fueron desviados por los Schoklender, que se valieron de una red de sociedades para adquirir inmuebles, autos, motos y yates, y lavarlos en financieras cuyos responsables fueron también procesados, según explicaba el diario La Nación.
Lamentables fueron las declaraciones de Bonafini sobre el Papa Juan Pablo II: “Nosotras deseamos que se queme vivo en el infierno. Es un cerdo. Aunque un sacerdote me dijo que el cerdo se come, y este Papa es incomible” y otras frases como:El mensaje de la Iglesia es golpista. No cambia en nada los conceptos de su posición golpista y cómplice de la dictadura”.
Hoy, ya no está Bonafini, pero las que integran el comite de Madres de Plaza de Mayo, siguen siendo tan o más miserables que su expresidenta, porque si padecieron el sufrimiento por la desaparación de sus hijos en la dictadura militar, no vacilan en apoyar al régimen criminal de Nicolás Maduro y tampoco son solidarias con esas madres venezolanas a les que le han secuestrado o asesinado a sus hijos.
El miserable comunicado en apoyo al dictador
Conviene recordar un poema del gran Leopoldo Lugones que parece definir a las supuestas defensoras de los derechos humanos y que dice: “La basura que se barre, no deja de ser basura aunque por los aires suba, basura será en el aire”
