En una entrevista realizada este lunes, la vicepresidenta de Ecuador y embajadora en Israel, Verónica Abad, lanzó acusaciones contundentes contra el presidente del país, Daniel Noboa, y su Gobierno, denunciando un persistente patrón de hostigamiento. A pesar de las presiones, Abad afirmó su firme decisión de no renunciar y de permanecer en su cargo.
Abad, quien también ha asumido la función diplomática en Tel Aviv para mediar por la paz en Gaza, destacó que las tensiones entre ella y el presidente Noboa no son nuevas, remontándose incluso a la campaña electoral. En la entrevista concedida al diario La Hora, Abad expresó: “Hoy quieren destituirme a cuenta cabal”, refiriéndose a un proceso en curso en el Tribunal Contencioso Electoral (TCE).
La vicepresidenta señaló que el hostigamiento ha sido evidente y que incluso ha enfrentado decretos inconstitucionales, además de restricciones por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana para hacer declaraciones públicas sin autorización previa.
Abad insistió en que detrás de estas acciones está el Gobierno, liderado por Noboa, afirmando que “él es la cabeza” y que se ha excedido en sus límites. En un tono irónico, Abad no descartó la posibilidad de ser sustituida por no cumplir con la misión de lograr la paz en Tel Aviv en el tiempo estipulado.
La detención de su hijo Sebastián Barreiro por un caso de presunto tráfico de influencias en la Vicepresidencia también fue mencionada por Abad como parte del hostigamiento que ella denuncia. Insistió en que su hijo es inocente y calificó su detención como “lawfare”, destacando el abuso de poder por parte de jueces y fiscales.
En sus declaraciones, Abad reafirmó su compromiso con la legalidad y la voluntad del pueblo ecuatoriano, afirmando que permanecerá firme en su cargo. “Los ecuatorianos no van a permitir una atropellamiento más a su voluntad”, expresó. Además, hizo hincapié en la importancia de defender las ideas sin recurrir a la demonización de adversarios políticos.
