¿Quién te conoce “Gato” Sylvestre?

“Más que periodistas imparciales lo que hace falta son periodistas honestos”
José Luis Cebrián.-

Un periodista militante K, del canal ultrakirchnerista C5N, un tal Gustavo “Gato” Silvestre, que anteriormente laburaba en TN y un día se convirtió en defensor del kirchnerismo, no mira el desastre de su gobierno, no habla de los 20 millones de argentinos que viven bajo la línea de pobreza y de los más de cinco millones que están en la indigencia, según cifras oficiales.

No hace referencia a lo que el kirchnerismo hizo para destrozar la economía, ni menciona las causas de corrupción de Cristina Kirchner, la defiende y avala.

Si fuera un periodista serio preocuparía lo que dice sobre Lacalle Pou, pero es un personaje sin credibilidad alguna; un pobre tipo.

No recuerda el mal manejo de la pandemia de su gobierno y los vacunatorios VIP, donde los amigos del poder se inocularon antes que la población en riesgo y no dice que Uruguay fue un ejemplo ante el mundo en el combate del virus.

Es tanto su desvarío, que se ocupa en defender a un régimen dictatorial como el de Venezuela que atropella los derechos civiles y Sylvestre arremete contra el presidente uruguayo por defender la candidatura de la opositora, María Corina Machado, inhabilitada por el tirano chavista.

Uno de sus panelistas un ignoto de nombre Pedro Brieguer, también criticó al mandatario uruguayo. El sexagenario Pedro sería mejor que se amigara con el champú para su desalineada cabellera. Un buen lavado no hace daño a nadie y es saludable.

No menciona el periodista K, el informe de UNICEF de este año que revela que “Dos de cada tres niñas y niños de Argentina (66%) son pobres por ingresos o están privados de derechos básicos, como el acceso a la educación, la protección social, a una vivienda o un baño adecuado, al agua o a un hábitat seguro”.

Pero habla del problema del agua en Uruguay, sin fijarse que niños argentinos no tienen acceso al vital elemento.

Califica a Lacalle Pou de “mentiroso” y tergiversa la historia. Sylvestre no dice una palabra de que en Uruguay, el tema de la falta de agua se pudo solucionar antes de la llegada del actual presidente, pero que Tabaré Vázquez terminó dándole el dinero que se iba a utilizar en la represa de Casupá a la hoy intendente de Montevideo, Carolina Cosse, para su capricho del megaestadio del Antel Arena, una obra faraónica que en principio iba a costar 40 millones de dólares y terminó siendo una erogación inexplicable de 118 millones de la moneda norteamericana, que el gobierno del Frente Amplio nos obligó a pagar a todos los uruguayos.

Que le pregunte a su columnista estrella, el “Pepe” Mujica, que ha reconocido el error del FA, en este tema.

Desde luego que lo que diga el tal “Gato”, no se puede tomar en serio, es tan solo un personaje menor del periodismo militante argentino.

¡Ah, gatito, no informes mal, investigá antes de hablar! El problema del agua es solo en Montevideo, ese faltante no existe en el resto del país. No es verdad el título: “Sequía total en Uruguay”.

Es cómico que Sylvestre le diga al presidente uruguayo que le pida ayuda a la Argentina por el tema del agua, cuando Alberso se queja de la sequía en su propio país y cuando no supo combatir al coronavirus que dejó -por su negligencia- 130.000 muertos.