El Gobierno de Venezuela desplegó el jueves 1.350 funcionarios en los municipios fronterizos San Antonio y Pedro María de Ureña, en el estado Táchira (oeste), como parte de un dispositivo de seguridad que busca contrarrestar la violencia en estas regiones tras un ataque ocurrido el 7 de mayo.
“Les informo que hoy (jueves) hemos desplegado en la zona de frontera San Antonio y Ureña el Operativo Frontera de Paz con 1.350 efectivos de seguridad ciudadana para contrarrestar la violencia criminal que pretende extenderse desde el Norte de Santander (noroeste de Colombia) hacia nuestro territorio”, señaló el mandatario regional Freddy Bernal en un mensaje a través de su cuenta de Twitter.
El gobernador pronto que el dispositivo responde a la necesidad de garantizar la de empresarios, comercios y ciudadanos de estas entidades, luego del lanzamiento de una granada fragmentaria en un local comercial nocturno ubicado en el municipio de Ureña, que arrojó un saldo de o cho personas heridas.
En un video colgado junto al mensaje, Bernal explicó que el Gobierno reveló una lista importante de un grupo de delincuentes, por los cuales encontramos recompensa, ante los diversos organismos de seguridad de Colombia con la intención de articular acciones para su captura.
El funcionario denunció que desde Colombia existen grupos que pretenden instaurar la violencia en el territorio venezolano.
Más temprano, el presidente Nicolás Maduro conversó con el ministro de Defensa de Colombia, Iván Velásquez, sobre la importancia de fortalecer la cooperación en materia de seguridad y paz.
Además, las autoridades de los dos países acordaron fortalecer la cooperación militar en cinco puntos centrales con el objetivo de avanzar en la lucha común contra el crimen en la frontera, mejorar la comunicación, las labores de inteligencia y defensa entre ambas naciones. (Sputnik)
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