“Solo hay dos cosas infinitas, el universo y la estupidez humana,
y no estoy muy seguro de la primera” – Albert Einstein
Que el gobierno argentino de Alberto Fernández y Cristina Kirchner navega sin rumbo, ya no quedan dudas y esto lo asevera las palabras de la ministra de Trabajo, Raquel “Kelly” Kismer de Olmos, que en una entrevista en televisión en canal 9 de Buenos Aires pidió dejar en un segundo plano la lucha contra la inflación durante el Mundial de Fútbol de Qatar, ya que “un mes no va a hacer una gran diferencia”.
“Yo considero que hay que trabajar todo el tiempo por la inflación, pero un mes no va a hacer una gran diferencia y, en cambio, desde el punto de vista anímico, desde lo que significa para los argentinos, queremos que Argentina sea campeón”, dijo la funcionaria.
Agregó que “Ahora, si el conjunto de los argentinos puede tener una alegría, yo creo que se merece una alegría el pueblo argentino: tiene una aspiración, ver no sólo a su equipo campeón, sino a Messi campeón”.
Los dichos de la ministra kirchnerista fueron rechazados por la sociedad argentina que vive en medio de datos atroces sobre la inflación, donde los informes privados que recibe el Banco Central de la Nación, apuntan a que la inflación será este año del 100 % y en 2023, del 90 %.
No es el primer papelón de la ministra ya que días atrás respondió ante la pregunta de otro periodista “¿Usted ha escuchado lo que dijo el señor Fortunato Seco?” y la funcionaria respondió: “Siempre lo escucho cada vez que lo veo en los medios. No compro su newsletter, eso sí”, aseguró, aunque Fortunato Seco nunca existió y era una broma de quien la entrevistaba.
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