Uruguay tiene una necesidad cada día más incipiente de revertir una situación que por años y por impedimentos legales, no podía deshacerse de los buques en desuso, que ya, sin vida útil, se convirtieron en un problema y generaron el “cementerio de chatarra” en la entrada al puerto de Montevideo, afectando peligrosamente la navegación.
Pero eso no era todo el problema, los barcos que debían salir de circulación, necesitaban ser desguazados para que no pasaran a engrosar la lista de los que ya estaban en el cementerio y para ello era imprescindible contar con expertos que brindaran un servicio integral, cortando esos buques con solvencia y terminar con la grave situación.
Para conocer la realidad, ICN Diario, ha conversado con Álvaro Nicola, titular de la empresa Corporación Aceroceánico Uruguay que presta ese servicio de cortado y desguace naval en Uruguay.
-Lo que hacemos nosotros es exclusivamente el desguace de las embarcaciones que están en desuso- cuenta Álvaro Nicola- como también de buques que adquirimos a agencias navieras, que son naves que ya están obsoletas, fuera de servicio y que no pasan por dique. Eso lleva un proceso previo por ANP, Prefectura y Marina Mercante, para poder llegar al desguace de esas embarcaciones, explicó.
-¿Los buques abandonados le generan un problema a Uruguay?
-Si. Los barcos que quedaron abandonados en el dique de cintura, han sido un problema que ha comenzado a solucionarse, porque el Estado, para poder actuar, debió hacer trámites judiciales extensos que demoraron años para lograr intervenir y llegar al desguace, asegura nuestro entrevistado.
Nicola señala: Nosotros hemos tenido reuniones en Escribanía de Marina y una de las cosas que planteamos es que los trámites no debían demorar tanto, porque esos barcos debían desguazarse si o si, no es algo que se pueda reflotar, no van a volver a navegar, asevera. El tema es que ante la demora, las embarcaciones están allí flotando y varios se han hundido, debiendo el Estado desembolsar mucho dinero para reflotarlos y después ir al desguace, explica Nicola.
La problemática se genera en empresas navieras que ya no trabajan, algunas calificadas como “golondrinas”, que estuvieron y se fueron dejando las embarcaciones, pero no se puede ir y sacarlas o desguazarlas. Se deben cumplimentar trámites que exige la normativa y eso lleva tiempo y genera un enorme desembolso al Estado.
– ¿Qué ofrece Corporación Aceroceánico Uruguay?
– Con nuestra empresa trabajamos en esto desde hace muchos años. Cuando empezamos con el desguace naval, nos reunimos con directores de la Administración Nacional de Puertos (ANP) y planteamos que nosotros queríamos ofrecer un servicio eficiente y lograr cortar esos buques que estaban en el llamado “cementerio de chatarra”, que en ese momento estaban flotando, pero se nos dijo que eso debía salir por licitación pública y cuando salió ese llamado muchas embarcaciones ya se encontraban hundidas y ese genera que deben ser reflotadas con enormes gastos, explicó Álvaro Nicola.
Para conocer como se trabaja en el desguace naval entre en el siguiente enlace:













