“No vamos a aflojar en Rocinha. Este es el quinto día de operaciones. Ayer encontramos en la región una gran cantidad de armas y drogas, bien como muchos indicios de la presencia de narcotraficantes. Estamos seguros de que la respuesta fuera de la favela se debe a eso”, declaró el gobernador, refiriéndose al fuego cruzado entre policías y narcos este mismo viernes por la mañana.
La favela es blanco de operaciones diarias de la Policía Militar desde el último domingo (17), cuando estallaron enfrentamientos entre bandas rivales por el control de puntos de venta de drogas.
Después de una reunión con el secretario de Seguridad del estado de Río, Roberto Sá, el general Mauro Sinott, comandante de la 1.ª División del Ejército, informó que las Fuerzas Armadas también ayudarán a controlar el tráfico en la región de Rocinha, tanto en las calles como en el aire.
El jefe del Estado Mayor Conjunto de las Operaciones en Apoyo al Plan Nacional de Seguridad en Río de Janeiro, almirante Roberto Rossatto, dijo hoy que las Fuerzas Armadas van a apoyar la reanudación del control de la favela de Rocinha con acciones en la mata y en las calles las principales vías de acceso a la comunidad para que las fuerzas de seguridad estatales actúen con más facilidad.
Según Rossatto, a diferencia de las otras acciones de las Fuerzas Armadas en Río, esta vez las tropas están actuando en los accesos a la comunidad afectada y en su entorno, en la vegetación de mata cerrada, con el uso de helicópteros para desembarcar a hombres del Ejército entrenados para hacer el reconocimiento y militares para auxiliar la comunicación de la operación.
El almirante dijo que la Carretera de la Gávea divide a la comunidad en dos partes: de un lado a Rocinha y del otro el Vidigal y, por eso, se ha hecho un cerco modificado, dividiendo el terreno, para que las tropas puedan actuar con mayor eficacia. Las Fuerzas Armadas permanecerán en la Rocinha por tiempo indefinido, según Rossato.
El secretario de Seguridad de Río de Janeiro, Roberto Sá, dijo que los criminales están, en su mayoría, abrigados en la selva, pero como Rocinha es muy grande, ellos pueden estar escondidos también en casas en la comunidad.
Las imágenes (Agencia Brasil)
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