El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, desestimó participar como candidato a las elecciones de febrero de 2017, pese a que un movimiento juvenil denominado “Rafael, contigo siempre” ya ha recogido más de un millón de firmas en todo el país para lograr una enmienda constitucional que le permita aspirar poder reelegirse para un tercer mandato.
“No, mi decisión está tomada; le agradezco mucho a los jóvenes”, dijo a un panel de periodistas extranjeros a cuyas preguntas respondió desde el Palacio de Carondelet, según ha informado la agencia estatal Andes.
El mandatario señaló que es una satisfacción para un político que los jóvenes tengan esa propuesta, aun cuando existe un candado constitucional que impide a los que ostentan el cargo de presidente ir a una tercera reelección.
“Pese a mi pública negativa ser candidato, los jóvenes insisten”, apuntó al reconocer que es “un sano orgullo y un inmerecido reconocimiento”.
Reiteró que su decisión “está tomada y lo importante es que se reelija la Revolución” de lo cual dijo tener fe para que continúe “este proceso histórico que realmente ha cambiado a nuestro país”.
“Pero nosotros tenemos mucha fe en nuestro pueblo; creo que trabajando como si no tuviéramos un solo voto, como siempre hacemos, y con el apoyo y el cariño de nuestro pueblo; con el legado que ha dejado la Revolución, tendremos una nueva victoria en febrero de 2017”.
No obstante, señaló que todavía median 200 días hasta las elecciones, en febrero de 2017, y va a haber una campaña muy sucia, en la que ya quieren manchar la imagen del exvicepresidente Lenin Moreno, quien suena como candidato. Además indicó que “hay que ver cómo marcha la economía, que es determinante en los procesos políticos”.
Con esta decisión, Rafael Correa toma distancia de sus colegas Daniel Ortega de Nicaragua y Evo Morales de Bolivia que constantemente buscan cambios en las leyes electorales para perpetuarse en el poder.