En su alocusión, Clinton señaló: “También quiero tomar un momento para abordar el video circula en Internet que ha llevado a estas protestas en varios países. Permítanme explicarlo muy claramente – y espero que sea obvio: que el Gobierno de Estados Unidos no tenía absolutamente nada que ver con este video. Rechazamos absolutamente su contenido y mensaje. El compromiso de Estados Unidos a la tolerancia religiosa se remonta a los inicios de nuestra nación. Y como ustedes saben, somos receptivos de personas de todas las religiones, muchos de los cuales vinieron a este país buscando el derecho a practicar su propia religión, incluyendo, por supuesto, millones de musulmanes. Y tenemos el máximo respeto a la gente de fe”, puntualizó.
Un vídeo repugnante y reprobable
La secretaria de Estado agregó: “Para nosotros, para mí personalmente, este video es repugnante y reprobable. Parece tener un efecto profundamente cínico: denigrar a una gran religión y provocar rabia. Pero como dije ayer, no existe ninguna justificación, ninguna en absoluto, para responder a este video con violencia. Condenamos la violencia que se ha traducido en los términos más enérgicos, y apreciamos mucho que muchos musulmanes en los Estados Unidos y alrededor del mundo se han pronunciado sobre esta cuestión”, subrayó.
Hillary Clinton expresó que “la violencia, creemos, no tiene lugar en la religión y hay formas de honrar la religión. El Islam, como otras religiones, respeta la dignidad fundamental de los seres humanos, y es una violación de esa dignidad fundamental para librar ataques contra inocentes. Mientras hay quienes están dispuestos a derramar sangre y tomar la vida de inocentes en nombre de la religión, en nombre de Dios, el mundo nunca sabrá de una paz verdadera y duradera. Es especialmente malo para la violencia dirigida contra las misiones diplomáticas. Estos son lugares cuyo propósito es pacífico: promover una mejor comprensión entre diferentes países y culturas. Todos los gobiernos tienen la responsabilidad de proteger todos los espacios y la gente, porque para atacar una Embajada es atacar la idea de que podemos trabajar juntos para construir comprensión y un mejor futuro”.
Clinton reflexionó: “Ahora, sé que es difícil para algunas personas entender por qué Estados Unidos no puede sólo prevenir que este tipo de videos reprobables puedan ver nunca la luz del día. Ahora, quiero señalar que en el mundo de hoy con las tecnologías actuales, es imposible. Pero incluso si fuera posible, nuestro país tiene una larga tradición de libertad de expresión consagrado en nuestra Constitución y nuestras leyes, y no podemos impedir que los ciudadanos expresaran sus opiniones por lo desagradables sean”, concluyó.
Hay, por supuesto, diferentes visiones alrededor del mundo acerca de los límites de la libertad de expresión y libertad de expresión, pero no debe haber ningún debate sobre la proposición simple que en respuesta al discurso de la violencia no es aceptable. Todos – si somos líderes en el Gobierno, líderes de la sociedad civil o líderes religiosos – nos debemos trazar la línea en la violencia”, señaló Clinton.
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