
El gobierno de Obama planea abrir el servicio aéreo comercial regular este otoño entre los dos países y designar diez nuevos aeropuertos como puntos de partida, con un máximo de 110 vuelos diarios entre los EE.UU. y Cuba. Estos aeropuertos son motivo de preocupación para el Comité de Seguridad Nacional como ISIS y otros grupos terroristas continúan atacando el sector de la aviación.
El Presidente del Comité de la Seguridad Nacional Michael McCaul dijo en un comunicado que: “En un momento en que la Administración Obama está desplegando la alfombra roja para La Habana, el gobierno cubano se niega a ser abierto y transparente con los representantes de los pueblos. Por desgracia, parece que es más fácil para los cubanos que vienen a Estados Unidos que para los miembros del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de llegar a Cuba. Últimos lugares de los aeropuertos de salida son de importancia crítica para nuestra seguridad nacional, pero estas preocupaciones de seguridad parecen estar tomando un segundo plano a los esfuerzos de construcción legado del Presidente”.
Por su parte el congresista John Katko (R-NY), dijo: “Seguimos sin saber si Cuba tiene los escáneres corporales adecuados y sistemas de detección de explosivos en su lugar, si se dispone de la tecnología para la detección de pasaportes fraudulentos o ID, o cómo se manejan los trabajadores de la aviación, y si agentes aéreos federales se les permitirá volar misiones a Cuba en vuelos comerciales. Este es un gobierno (el de Cuba) que fue retirado de la lista como un estado patrocinador del terrorismo hace un año, y no es suficiente confiar en la palabra del régimen de Castro que estos aeropuertos son seguros”, dijo el diputado del Comité de Seguridad.









