
El vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, destacó los avances que ha mostrado el país en materia social y económica, situación que ha conllevado a disminuir las brechas de desigualdad social, al tiempo de que el 50 % de las personas que estaban en condiciones de extrema pobreza pasen a la clase media.
“Bolivia era uno de los países con mayor desigualdad en América Latina, donde el 10 % más rico tenía 130 veces más que el 10 % más pobre, en los últimos años esa diferencia la hemos reducido, es decir, hoy, el 10 % más rico tiene 39 veces más riqueza que el sector más pobre”, indicó.
Las declaraciones las realizó el representante de gobierno en el marco de la inauguración del evento “Oportunidades e inversiones en tiempos difíciles”, organizado por el Consejo Empresarial de América Latina (CEAL), donde explicó que en el proceso de nacionalización no se afectó la inversión privada, solo se recuperaron las empresas estatales, sobre todo, aquellas que generan mayor rentabilidad, con el objetivo de generar riqueza y distribuirla en beneficio de la población boliviana.
Asimismo, García Linera argumentó que gracias a las políticas educativas impulsadas por el Ejecutivo se establecieron estrategias de alfabetización para los ciudadanos que no accedieron a centros educativos, además se fomentó la formación académica lo que permitió contar con una mayor cantidad de universitarios titulados.
Por otra parte el vicepresidente del Estado distinguió la ampliación del mercado interno y el crecimiento de las inversiones que se multiplicaron por ocho veces, en esta última década.
Por último ponderó el papel del Banco Central de Bolivia porque es un motor que coadyuva en las políticas del Estado, tales como: controlar la inflación, la emisión de bonos, controlar los flujos de la tasa monetaria, establecer las tasas de interés, fijar las tasas de cambio, entre otras decisiones que acompañan la estructura de desarrollo económico del país.









