El diario paraguayo informa que el director general de la Conmebol, Gorka Villar, participó, primero, según fuentes altamente confiables, de una presunta “quema de archivos”, luego habría facturado a la Confederación nada menos que US$ 525.000 para finalmente pedir licencia y viajar a España. Villar es hombre fuerte del procesado en EEUU, Juan Ángel Napout y además Villar es requerido por la justicia uruguaya por extorsión a clubes de ese país, por lo cual ya fue citado a declarar en Montevideo.
“Villar y su equipo estaban realizando una ‘limpieza’ de evidencias de las numerosas y graves irregularidades que están siendo investigadas tanto por el FBI y la justicia de los Estados Unidos como por la justicia de Uruguay”, señala ABC.
Agrega que “Se presume que Villar, pese a haberlo negado en su momento, formó parte del staff de abogados que asesoró al expresidente de la Conmebol Eugenio Figueredo, de manera totalmente irregular, pues ya era pagado por la Conmebol y por ende no podía estar defendiendo a quien supuestamente perjudicó a la institución”.
La extorsión
Gorka Villar habría amenazado a los clubes de Uruguay de fuertes sanciones a sus presidentes así como la exclusión de torneos como Copa Libertadores, Sudamericana y otros que sean organizados por la Confederación, si continuaban con el juicio penal contra la Conmebol por sus irregularidades:
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