Tras anunciar ayer en Washington el acuerdo entre Estados Unidos y Brasil, mediante el cual ambos países se comprometieron a aumentar la participación de fuentes renovables en sus matrices energéticas, los dos presidentes respondieron a preguntas de periodistas. Una de las cuestiones que le plantearon a la mandataria era cómo conciliar la visión que Brasil tiene de sí mismo como líder mundial con la de los Estados Unidos, para quienes el país tendría un papel regional. Cuando le tocó el turno de responder, Obama hizo hincapié en que Brasil es una “importante potencia mundial”.
Espionaje
En lo que se refiere a las denuncias de espionaje a los ciudadanos y a las autoridades brasileñas por parte de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA, por sus siglas en inglés), que le hicieron cancelar su viaje a Washington, programada para 2013, la jefa de Estado brasileña dijo que “desde entonces, muchas cosas han cambiado”.
Rousseff subrayó “que Obama y Estados Unidos han declarado en otras oportunidades que ya no habría más actos de intrusión en países amigos”. Y agregó: “Creo en Obama, y él me dijo que si fuera el caso de que necesitara cualquier información no pública sobre Brasil, él me llamaría. Estoy segura de que las condiciones son bastante diferentes ahora”.