Al ser tan lamentables estos eventos, debe quedar claro que damos la bienvenida a las acciones y a las investigaciones realizadas por las autoridades de Estados Unidos y Suiza, y creemos que van a ayudar a reforzar las medidas que ya ha tomado la FIFA para erradicar cualquier delito en el fútbol”.
Es increíble lo que dice Blatter en un comunicado y parece una burla al mundo estas declaraciones ya que la corrupción viene de muchos años atrás, el nunca denunció nada, fueron otros los que se encargaron de llevar a la Justicia los inocultables casos de estafas, sobornos y extorsiones.
El es el titular de la FIFA; es como si un elefante se metiera dentro de su casa y el dueño no se diera cuenta. Nadie lo va a creer. Es una verdadera falta de respeto a la inteligencia de la gente.
Parecería que esos dirigentes que él avaló y los impuso en los distintos cargos, andaban por el mundo con antifaces asaltando países y como si hubieran hecho sus tropelias sin que Blatter se enterara de lo que hacían sus acólitos.
Nadie puede tragarse esa historia, ya que don Joseph no permite que nada se haga sin su conocimiento y el que se atreviera a hacerlo, sería despedido de inmediato.
Las acusaciones del Departamento de Justicia de EEUU a los dirigentes, es de haber aceptado sobornos por 150 millones de dólares y comisiones desde principios de los noventa hasta la actualidad a cambio de que ciertas firmas recibieran los derechos de transmisión, publicidad y auspicio de torneos futbolísticos en EEUU, América Latina y el Caribe.
Pero el tema de la corrupción va más allá, con el tema de la arbitraria designación de Catar para organizar la Copa del Mundo.
Ante tanta corrupción el presidente Blatter debe renunciar de inmediato; él es el máximo responsable de la FIFA y es quien bajo su mandato se designó a los hoy acusados.
Por eso su declaración de hoy suena ridícula, falsa y intolerable: “Tras los acontecimientos de hoy, el Comité de Ética independiente -que está en el medio de sus propias investigaciones en relación con la adjudicación de las Copas Mundiales de la FIFA 2018 y 2022- tomó medidas rápidas para prohibir provisionalmente aquellas personas nombradas por las autoridades de cualquier actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional. Estas acciones están en la cima de un listado de pasos similares que la FIFA ha tomado durante el último año para excluir cualquier miembro que viole nuestro propio Código de Ética”.
Para comenzar, por ética, Blatter debe dar un paso al costado y desde allí abocarse a demostrar si es inocente como asegura; pero lo debe hacer desde afuera de la FIFA y si es posible, no regresar a regir los destinos del fútbol mundial
R.C. Gómez
Opinión
