El Consejo de Administración de Banco Madrid ha dimitido en pleno y por unanimidad en una sesión extraordinaria celebrada en la noche del miérvoles 11 de marzo, luego de evaluar la intervención decretada por el Banco de España. La decisión se ha tomado con la finalidad de “facilitar la tarea de los dos inspectores nombrados por el Banco de España”.
El lunes, la Financial Crimes Enforcement Network (FinCEN) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos ha anunciado su decisión de considerar a la entidad de crédito andorrana Banca Privada d’Andorra (BPA) como una institución financiera extranjera sometida a preocupación de primer orden en materia de blanqueo de capitales (primary money laundering concern), de acuerdo con la Sección 311 de la USA Patriot Act, proponiendo la adopción de determinadas medidas que afectan a la entidad y a su grupo.
BPA ostenta el 100% del capital de la entidad española Banco de Madrid, S.A. Por ello y para asegurar la continuidad de la actividad de esta entidad, teniendo en cuenta las decisiones adoptadas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y por el INAF, la Comisión Ejecutiva del Banco de España, en su sesión de hoy, ha acordado, de conformidad con lo previsto en el artículo 70.1.b) de la Ley 10/2014, de 26 de junio, de ordenación, supervisión y solvencia de entidades de crédito, la intervención de Banco de Madrid, designando interventores de la entidad a D. José Luis Gracia Cáceres y a D. Alejandro Gobernado Hernández, empleados del Banco de España.
En un comunicado anterior, el Consejo de Administración había señalado: “Banco Madrid considera muy importante resaltar que en la denuncia de las autoridades del Tesoro de los Estados Unidos que ha dado lugar a las actuaciones en curso no se menciona en ningún momento a Banco Madrid, sino exclusivamente a su matriz BPA.
Pese a la pertenencia a un mismo accionista, BPA y Banco Madrid son dos entidades totalmente independientes, cada una de ellas con sus propias estructuras operativas y que desarrollan su actividad con marcos regulatorios y legales distintos, los de Andorra y España, respectivamente.
Banco Madrid cuenta con su propio consejo de administración, una dirección independiente, un balance completamente separado y capital propio, sujeto a regulación y supervisión española, y por tanto, no disponible por su accionista”.









