
La carta, señala que el gobierno venezolano ha arreciado la persecución política en contra de quienes defendemos los valores de la libertad” y expresa que la envía para ratificar su compromiso con la causa democrática en Venezuela, y para confirmar su determinación a luchar por ella, subraya la parlamentaria venezolana.
Explica que el objetivo del Gobierno chavista es arrebatar arbitrariamente la inmunidad parlamentaria consagrada en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, expulsar a varios representantes del Parlamento y posiblemente encarcelarlos” y denuncia: “Yo estoy entre estas posibles nuevas víctimas de la represión desatada”.
Más adelante expresa textualmente: “El pasado 30 de abril de este año, varios diputados fuimos brutalmente golpeados por colegas oficialistas cuando nos negamos a aceptar que nuestro derecho de palabra estuviese condicionado por el reconocimiento de la legitimidad del Sr. Nicolás Maduro como Presidente de Venezuela. Ante la imposibilidad de callar nuestras voces por la fuerza, el régimen venezolano pretende ahora utilizar el sistema de justicia penal para doblegarnos.
Hoy, el gobierno me acusa de conspiración y traición a la Patria. Mediante la violación de la Constitución y las leyes, obtuvo un audio de una conversación privada que tuve con el historiador Germán Carrera Damas, en la biblioteca de su casa. Esta grabación ilegal de una conversación de más de dos horas fue reducida a 6 minutos y alterada en su secuencia y sentido. Posteriormente, el pasado 26 de junio, el entonces Ministro de Comunicación e Información de Venezuela, Ernesto Villegas, acompañado por el Alcalde de Caracas, Jorge Rodríguez, divulgaron este material a través de todos los medios de
comunicación nacionales e internacionales. Desde esa fecha, el audio ha sido repetido incesantemente por los medios “públicos”, utilizados por el partido de gobierno como omnipresentes maquinarias de propaganda gubernamental para la destrucción de la reputación de los disidentes”, explica María Corina Machado.
El resto de la carta denuncia, dice textualmente:
Con la divulgación del audio, entró en marcha de inmediato el aparato del Estado, que en la Venezuela actual es muy eficiente para la represión. El presidente de la Asamblea Nacional, teniente Diosdado Cabello, la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz y los diputados afectos al régimen, siguieron la orden gubernamental y se unieron a los esfuerzos por inhabilitarme políticamente. Cabe destacar que en el año 2010 fui electa diputada con el voto del 82,5% de los electores de mi circunscripción electoral, el porcentaje más alto obtenido por diputado alguno.
En la siguiente sesión plenaria de la Asamblea Nacional fue aprobada la creación de una “Comisión Mixta Encargada de profundizar las Investigaciones entorno a la Antidemocrática, Apátrida y Fascista confesión hecha por la diputada Maria Corina Machado”. Su solo nombre es una sentencia y refleja el estado de sumisión de los poderes prúblicos a los designios arbitrarios del gobierno central y de la alta cúpula cubano-venezolana que rige ilegitimamente a la nación.
Según lo que establece la Constitución venezolana, un diputado no puede ser investigado sin autorización previa del Tribunal Supremo de Justicia. Además, en este caso, la única “prueba” proviene de la comisi6n de un delito y fue forjada, por lo tanto, no tiene valor probatorio alguno.
La instalación de esta comisión es un paso más en el patrón de persecución en mi contra. Durante 14 años el gobierno de Chávez mantuvo una campaña implacable contra mi, así como en contra de la organización no-gubernamental SUMATE, de la cual fui cofundadora. Esta ONG que promovió la recolecci6n de firmas para el referendo revocatorio de 2004, y defiende la transparencia electoral y los derechos ciudadanos. He sido objeto de varias investigaciones y juicios, acusada de delitos como rebelión civil, y conspiración para cambiar la forma republicana de gobierno. Durante tres años se me mantuvo una prohibición de salida del país.
Cuando la amenaza, el insulto y la persecución judicial no funcionaron, el gobierno incurrió en la violencia física, llegando incluso a agredirme con puños y patadas en el salón de sesiones de la Asamblea Nacional.
En esta ocasión pretenden acusarme por el delito de “traición a la patria” el cual conlleva una pena de entre 20 a 30 años de prisión. Con este método totalitario del terror se busca liquidar el espiritu combativo de los venezolanos, acallar las voces que denuncian, expulsar a los legitimos representantes del pueblo, y crear ejemplos funestos de delitos de conciencia, víctimas de tribunales inquisitorios. Cabe destacar que en el año 2010 fui electa diputada con el voto del 82,5% de los electores de mi circunscripción electoral, el porcentaje más alto obtenido por diputado alguno.
En estas horas, más que nunca, reclamamos el apoyo de voces aliadas que hagan resonar nuestras denuncias en la comunidad internacional. Estamos en presencia de un gobierno cada vez más dictatorial y necesitamos que las democracias del mundo se sumen a nuestra lucha para que en Venezuela se restituya el estado de derecho y la independencia de los poderes. Este gobierno ilegítimo se sabe minoría, sabe de sus actuaciones ilegales y de su responsabilidad por sus incompetencias; por eso arremeten desde el terror cuando una persona alza la voz para expresar 1o que piensa, lo que cree, sin que le tiemble la voz, ni la mirada. Por eso requerimos solidaridad activa, pues la paz y la estabilidad en la región hoy más que nunca están bajo amenaza mientras no se restituya la democracia y la libertad en Venezuela.
María Corina Machado
Diputada a la Asamblea Nacional
República Bolivariana de Venezuela
Inicio Actualidad Diputada opositora denuncia que Maduro quiere encarcelar a políticos y a periodistas









