Por Paco Tilla.-
El Nobel otorgado a la opositora María Corina Machado, tiene a Maduro sin consuelo; porque según cuentan fuentes del palacio de Miraflores en Caracas, el ilegítimo anda llorando por los rincones.
Sus “becarios”, beneficiados con millones de dólares de los gobiernos de Chávez y Maduro tampoco pueden ocultar su dolor y desde las redes sociales, atacan a la ganadora del premio.
Ninguno es demócrata; allí parecen – entre otros varios beneficiados con dinero del pueblo venezolano- personas que están o han estado en la formación prochavista Podemos de España.

Y como como aves de rapiña salen a defender a quien les nutrió los bolsillos durante años.
A ninguno le importa que 9 millones de venezolanos abandonaran el país; que el déspota persiga, secuestre y torture a los opositores; que no exista la libertad de expresión y que Maduro, al día de hoy, no pueda demostrar que ganó las elecciones y que todo sea un fraude.
En sus posteos, los sirvientes del régimen atacan en forma cobarde a una mujer, que ella sola, es más valiente que todos estos personajes juntos.