
La burla se desvela como un golpe demoledor a la credibilidad de las instituciones estatales involucradas en el resonante caso ya que la presunta empresa española, Cosmo Airlines, que ofertó por los aviones en la subasta, increíblemente constituyó su domicilio legal en Uruguay en el Banco de la República (BROU) para solicitar el aval de U$S 13,6 millones y ahora esta institución bancaria no puede intimar a Cosmo para que pague dicho aval, porque la intimación se la tendría que enviar al propio banco estatal que otorgó el documento.
Los informantes consultados señalaron que cuando los organismos de contralor financiero quisieron averiguar por qué constaba ese domicilio como sede de Cosmo, las autoridades del banco no supieron qué responder.
Cuando se otorga un aval de este tipo, la empresa debe dar cuenta del domicilio en caso de que se necesario hacerle llegar alguna notificación. “El Banco República le va a mandar una notificación y le va a llegar a sí mismo”, señaló una fuente.
La publicación periodística agrega que: “Especialistas consultados explicaron que generalmente cuando una empresa extranjera sin sede en Uruguay solicita un aval constituye domicilio en un estudio jurídico o en algún otro lugar relacionado a sus actividades”.
Pero más sospechas se agregan a lo anterior: En el sitio web de Cosmo la dirección española que figura es Avenida de Burgos 114, 1º planta, 28050, Madrid. Pero en noviembre el periodista de Telemundo, Martín Sarthou viajó a España y buscó la sede de Cosmo y no la pudo encontrar. Las oficinas no existían y la telefonista que atendió no supo brindar información al respecto.
Más insólitas son las declaraciones del presidente del Banco República, Fernando Calloia que dijo que un notario del banco viajó a España para notificar a la empresa de la intimación de pago. ¿Era necesario incrementar los gastos enviando un funcionario a España cuándo existen otros medios menos costosos para hacerlo? ¿para qué hay una representación diplomática en España?, ¿Para qué el BROU tiene dos bancos corresponsales en Madrid: Pastor y Santander?, ¿Ninguno de ellos podía hacer este trámite de notificación?, son las preguntas que muchos se hacen pero Calloia insiste y explica que: “el escribano del Brou, Adalberto Mihalí, que viajó a Madrid no lo hizo para ubicar la sede legal de la aerolínea española ante la presunta irregularidad – como señala el semanario – sino que se trasladó porque la dirección que fijó Cosmo para obtener el aval era española”.
“El escribano del Brou viajó a España porque la empresa fijó domicilio en España, entonces, como fijó domicilio en España, el banco notificó a la empresa en España”, explicó y agregó que pudo realizar el trámite sin inconvenientes”, puntualizó Calloia.
Pero además un notario uruguayo, no puede hacer ninguna gestión o certificación fuera de Uruguay que involucre su título. El Colegio de Escribanos tendría que clarificar esta situación.
El BROU dice que no puede pagar el aval porque el Ministerio de Economía se equivocó
Según informa el diario El Observador, un informe de la división jurídica del Banco República (BROU) alertó que esa institución no está en condiciones de pagarle US$ 13,6 millones al fideicomiso que administra los bienes de la liquidada aerolínea de bandera Pluna, correspondiente al aval bancario que presentó la firma de capitales españoles Cosmo para participar del remate de los aviones Bombardier el 1º de octubre. Alega presuntas irregularidades contenidas en un documento elaborado por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), dijeron a El Observador fuentes políticas.
Según el informe del BROU, el documento –que forma parte del trámite de estilo para hacer efectiva la garantía– “no cumple con todas las reglas del Código de Comercio”. Se trata del documento por el cual el MEF le cede al fideicomiso la potestad para cobrar el aval.
Sin comentarios, saque usted amigo lector sus propias conclusiones.












