El Gobierno argentino manifestó su malestar por las prácticas militares que el Reino Unido lleva adelante en las australes Islas Malvinas, ocupadas por este país desde hace casi dos siglos, de acuerdo a un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores.
“La República Argentina rechaza una vez más, de manera categórica, la realización de maniobras militares en las Islas Malvinas”, expresó la Cancillería este miércoles.
Argentina informó que Reino Unido puso en práctica una nueva edición de los ejercicios militares denominados “Cape Bayonet”, que involucra a las tres fuerzas armadas desplegadas en el archipiélago: el Ejército británico, la Marina y la Real Fuerza Aérea.
“Estos ejercicios constituyen una injustificada demostración de fuerza y un deliberado apartamiento de los llamamientos de las numerosas resoluciones de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales, que instan tanto a la Argentina como al Reino Unido a reanudar las negociaciones”, enfatizó la Cancillería.
La nación sudamericana manifestó su predisposición para hallar una solución pacífica a la disputa de soberanía, y advirtió que la presencia militar británica en las Islas Malvinas confronta la voluntad de Argentina de resolver la controversia por medios pacíficos.
“La base militar británica en el Atlántico Sur no sólo es totalmente injustificada sino también representa una amenaza para toda la zona”, sostuvo el Ministerio de Relaciones Exteriores.
La insistencia de Reino Unido en mantener su presencia en el Atlántico Sur contraviene la resolución 31/49 de la Asamblea General de Naciones Unidas que insta a las partes a que se abstengan de adoptar decisiones unilaterales que modifiquen la situación preexistente.
También se vulnera la resolución 41/11, que exhorta “a los Estados de todas las demás regiones, en especial a los Estados militarmente importantes, a que respeten escrupulosamente la región del Atlántico Sur como zona de paz y cooperación”, observó la Cancillería.
El Gobierno argentino volvió a reafirmar su soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes que forman parte integrante del territorio nacional.
Una vez más, la nación sudamericana recordó que la disputa de soberanía es reconocida por las Naciones Unidas en la resolución 2.065 e insistió en su voluntad de reanudar las negociaciones.
Argentina reclama la soberanía de las Islas Malvinas desde 1833, año en que Reino Unido pasó a ocupar las islas.
Desde entonces, ambos países mantienen un litigio por la soberanía de la región, que llevó a que en abril de 1982 la dictadura argentina (1976-1983) intentara recuperarlas por medio de una guerra que culminó el 14 de junio de ese año con la derrota del país sudamericano y con casi 1.000 muertos entre ambos bandos solo durante el conflicto armado.
Reino Unido y Argentina retomaron sus relaciones diplomáticas en febrero de 1990, durante la gestión del entonces presidente Carlos Menem (1989-1999). (Sputnik)