El alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior, Josep Borrell ha expresado su apoyo al gobierno de España luego de que las autoridades de Nicaragua hayan denunciado “intromisión, injerencia e intervención” de la nación ibérica en asuntos internos de Managua.
“La Unión Europea respalda al gobierno de España ante las acusaciones inaceptables e injustificadas vertidas por las autoridades nicaragüenses y que han llevado a la llamada a consultas de su embajadora en Nicaragua”, ha indicado.
El conflicto diplomático ha desenfundado luego de que Madrid advirtiera que las elecciones en el país centroamericano no serán creíbles, situación que ha encendido la mecha del Ejecutivo nicaragüense, encabezado por Daniel Ortega. Estos han emitido una nota oficial donde han recordado que el país centroamericano “hace siglos que dejó de ser Colonia” de España, además, de acusarlos de haber cometido “terrorismo de Estado” en la década de los 80 situación que muestra “el carácter inmoral de las Instituciones españolas”.
Esta compleja situación ha conllevado a que España haya llamado a consultas a su embajadora en Managua, María del Mar Fernández-Palacios por las “graves e infundadas acusaciones contra la nación ibérica y sus instituciones”.
En este contexto el jefe de la diplomacia comunitaria ha sido enfático en señalar que la UE está unida en la condena de la represión sistemática por parte de las autoridades nicaragüenses y en la defensa de la democracia, el estado de derecho, el diálogo crítico pero respetuoso y los derechos humanos en Nicaragua.
A su vez el bloque europeo ha exigido al presidente Daniel Ortega y la vicepresidenta Rosario Murillo a detener esta espiral de acusaciones e insultos, cambiar de rumbo, liberar a todos los presos políticos detenidos en el último tiempo de cara a las elecciones presidenciales del 07 de noviembre y abrirse al diálogo con todos los actores políticos y sociales de la oposición quienes en la actualidad sufren y son víctimas de las medidas represivas del régimen de Ortega.