El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, para mantenerse en el poder y seguir teniendo los votos en el Congreso de los independentistas, no ha vacilado en postrarse ante quienes dijo jamás pactaría, los populistas y los separatistas que quieren dividir a los españoles.
Hoy, Sánchez, sólo pensando en perpetuarse en La Moncloa, se ha arrodillado ante los secesionistas y en contra de la opinión de los jueces del Supremo y del deseo de la mayoría de los ciudadanos, en acuerdo con su Consejo de Ministros obsecuentes, ha aprobado la concesión de indultos a los nueve condenados a penas de prisión en el juicio del procés.
Intentando justificar lo injustificable, la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha explicado que los indultos son una medida de gracia contemplada en la Constitución que respeta de forma fiel y escrupulosa la separación de poderes y que el Gobierno aplica porque la considera de utilidad pública para favorecer el diálogo, la convivencia y el reencuentro en Cataluña y entre Cataluña y el resto de España: “No vamos a renunciar, como gobierno, a hacer aquello que pensamos que es lo mejor para nuestro país, su convivencia, la estabilidad y su progreso”.
Montero ha afirmado que la medida no valida, ni cuestiona ni discute las resoluciones judiciales: “La justicia terminó su trabajo y ahora es el momento de la política”.
Montero ha señalado que el Gobierno es muy consciente de que los indultos pueden generar incomprensión o rechazo de una parte de la población y ha mostrado su respeto a estas posiciones.
Las críticas surge desde todos los ámbitos porque Pedro Sánchez entre sus ansías de poder, ha dado el primer paso de darles poder a los independentistas que no renunciarán a un referéndum para separarse de España.
Los propios separatistas se burlan de Sánchez y aseguran que seguirán con sus mismos reclamos. El presidente de la Generalitat, el independentista Pere Aragonès, ha manifestado claramente que “Los presos salen con la voluntad reforzada de construir una república catalana”. “Es la hora del referéndum de autodeterminación. Es la hora de la amnistía”, aseveró Aragonès ante la cúpula de su gobierno en Cataluña.
Los indultados no se arrepienten de sus actos de sedición que les llevaron a la cárcel; se le ríen en la cara a Sánchez y expresan en las redes sociales: “Amnistía, autodeterminación, independencia. Seguimos”, escribió el ex consejero de la Presidencia de la Generalitat de Cataluña, Jordi Turull.
Por su parte, quien fuera titular de Interior durante la rebelión del 1-O, Joaquim Forn, ha ha escrito en Twitter: “1.328 días en la cárcel. Ni un solo día de renuncia. Seguiremos luchando contra la represión, por el retorno de los exiliados y la independencia de Cataluña”.
https://twitter.com/quimforn/status/1407352042411155458
Otro de los sediciosos catalanes, el ex consejero de Exteriores Raül Romeva, afirma que “Indulto a 9 personas no esconderán la represión que continúan aplicando contra cientos de independentistas. No cederemos: amnistía y autodeterminación!”
https://twitter.com/raulromeva/status/1407253320876675072
El líder del PP Pablo Casado dijo que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con la concesión de los indultos a los golpistas del 1-O “le mintió a los españoles y tendrá que responder en la urnas”.
Según las declaraciones, el Gobierno del PSOE ha pagado este martes con los indultos a los políticos condenados por sedición y malversación –el peor delito de corrupción que puede cometer un político– por el golpe de Estado del 1-O. Para el PP la traición de Sánchez, es por un puñado de votos para mantenerse en La Moncloa.
