El presidente de Colombia, Iván Duque reafirmó la postura del Ejecutivo en relación a una eventual negociación de paz con la guerrilla,asegurando que si el Ejército de Liberación Nacional- ELN quiere retomar el diálogo con el gobierno debe en primera instancia liberar a todos los secuestrados y poner fin a sus actividades criminales.
“La liberación de todos los secuestrados, porque ese tiene que ser un acto “bona fide”, no conmigo, no con el Gobierno; con un país, que rechaza el secuestro, porque no hay nada que justifique un secuestro”, sostuvo.
En esta línea afirmó que si el ELN busca un escenario de conversaciones orientado a la desmovilización, el desarme, la reinserción y la no repetición debe demostrar su voluntad política en base a estas condiciones, ya que serían una señal de paz y confianza para todo el país.
“Aproximar un proceso de conversación mientras se sigan produciendo actos criminales solamente engendra más violencia y termina validando la violencia como mecanismo de presión al Estado”, dijo.
Ante esto el Mandatario justificó que este condicionamiento no representa una intimidación ni un ultimátum del Ejecutivo, sino más bien el rechazo total frente a cualquier forma de violencia.
“Si queremos todos realmente construir ese escenario, creo que todos los colombianos como sociedad deberíamos plantear esto, no como una intimidación, no como un ultimátum, sino como un principio que nos identifique a todos en el rechazo inequívoco a cualquier forma de violencia”, subrayó.