
El relator especial de la ONU sobre tortura y otros tratos crueles o inhumanos instó hoy a los legisladores brasileños a rechazar una enmienda constitucional que rebajaría la edad para imputar responsabilidades penales a los menores delincuentes.
Juan Méndez planteó esta petición en vista de que el Comité de Justicia del Senado de Brasil se prepara para votar sobre una enmienda a la Carta Magna que reduciría de 18 a 16 años la edad para inculpar criminalmente a los menores delincuentes.
“La detención de niños (?) está inevitablemente vinculada con malos tratos, además de que los coloca en un alto riesgo de violencia, abusos y actos de tortura mientras están privados de la libertad”, puntualizó el experto en un comunicado.
Aseveró que el enjuiciamiento de delincuentes adolescentes con procedimientos aplicados a los adultos viola las obligaciones de Brasil con la Convención de Derechos de los Niños.
Méndez agregó que aún si son condenados, los menores deben cumplir sus sentencias en instalaciones separadas de las de los adultos.









