En un caso que no tiene precedente histórico y en base de un polémico fallo del Tribunal Supremo Federal (TSF) de Brasil, la joven influencer Isabella Cêpa es la primera persona en ser reconocida como víctima de persecución estatal por su abierta oposición a la ideología de identidad de género.
Como ya informó Reduxx , Cêpa fue objeto de investigación penal tras publicar en redes sociales sobre Erika Hilton, un político que se identifica como mujer. Hilton fue elegida para el gobierno municipal de São Paulo en noviembre de 2020, obteniendo su escaño y se le otorgó el título de la mujer más votada de Brasil.
Condenada por opinar que la mujer más votada en São Paulo era un hombre
“En ese momento ni siquiera sabía quién era esa persona. Solo vi un titular en Instagram que celebraba que ‘la mujer más votada de São Paulo es una mujer trans’”, contó Cêpa a Reduxx durante una entrevista en 2022, relatando cómo comenzó su calvario. “Luego, compartí un video con mis seguidores diciendo que me decepcionó saber que la mujer más votada en São Paulo (y luego descubrí que era en todo el país) era un hombre”.
La izquierdista Hilton – aliada al presidente Lula – denunció a Cêpa, una activista feminista, ante la policía, lo que dio lugar a una investigación penal. En enero de 2022, las autoridades citaron a Cêpa a una comisaría para interrogarla. Fue entonces cuando se enteró de que Hilton había presentado una denuncia por sus comentarios en redes sociales y lo hizo de acuerdo a que en 2019, el Supremo Tribunal Federal de Brasil (STF) tomó una decisión al equiparar la discriminación por homofobia y transfobia con el delito de racismo, estableciendo que la discriminación contra la comunidad LGBTQ+ es un delito penal.
La decisión del STF se basó en la Ley 7.716/89, que originalmente tipificaba el racismo como un delito, y ahora extiende esta protección a la orientación sexual y la identidad de género. Esto significa que actos de discriminación basados en la orientación sexual o identidad de género pueden ser procesados y castigados bajo la misma ley que el racismo. En definitiva no se puede opinar libremente sobre estos temas.
Esta medida ha sido celebrada por organizaciones de defensa de los derechos LGBTQ+, aunque también ha generado controversia entre otros sectores de la sociedad brasileña, quienes argumentan que podría limitar la libertad de expresión, según el Global Equality Caucus.
Los ministros del polémico STF, Celso de Mello, Edson Fachin, Alexandre de Moraes, Luís Roberto Barroso, Rosa Weber, Luiz Fux, Carmen Lúcia y Gilmar Mendes votaron por el marco de la homofobia y la transfobia como tipo penal definido en la Ley del Racismo (Ley 7.716 / 1989).
Tras conocer las investigaciones de la Fiscalía, Cêpa descubrió que enfrentaba hasta 25 años de prisión por el supuesto “delito”, de opinar en forma diferente.
“Persecución política”
Según cuenta Reduxx, en julio de 2024, Cêpa fue detenida en el aeropuerto de Salvador de Bahía mientras intentaba viajar a España para visitar a una amiga. Agentes federales detectaron una alerta relacionada con su pasaporte y la apartaron para una inspección más exhaustiva. Durante la entrevista posterior, las autoridades determinaron que su situación podría cumplir los criterios de persecución política. En respuesta, contactaron a la aerolínea con la que había reservado y les ordenaron que no despegaran sin ella a bordo. Un oficial escoltó a Cêpa hasta el avión y le desaconsejó regresar a Brasil, lo que marcó el inicio de un período de apatridia. En junio de 2025, Cêpa solicitó formalmente el estatus de refugiado.
Con apoyo de la Agencia de Asilo de la Unión Europea, Cêpa obtuvo protección internacional plena, aunque el país receptor no fue revelado por razones de seguridad.
La organización feminista MATRIA Brasil, celebró la decisión de otorgarle asilo, pero denunció la falta de respuesta de las autoridades brasileñas. Según un vocero, incluso llevaron a Cêpa a una reunión con la entonces ministra de la Mujer, Cida Gonçalves, sin obtener ningún tipo de asistencia estatal.
Isabella recebeu status de exilada política na Europa por conta da perseguição judicial que sofre no Brasil.
Um precedente importantíssimo para mulheres, brasileiras e estrangeiras, que são perseguidas por reconhecerem a realidade do sexo e se recusarem a abrir mão de espaços e… https://t.co/9yDniPQhh7
— MATRIA (Brasil) (@MATRIAoficial) August 6, 2025
“La única vía que le quedó fue recurrir a una medida extrema: pedir asilo político. En nombre de su seguridad, no podemos dar más detalles, pero podemos confirmar que ahora está a salvo”, señalaron desde MATRIA.
Tampoco se menciona, por razones de seguridad, el país europeo que le otorgó el asilo.