Lula reacciona indignado y pide explicaciones a diplomático de EEUU por presunta amenaza al Poder Judicial de Brasil

El ministro Flávio Dino, del Supremo Tribunal Federal (STF) y a la vez miembro del Partido Comunista brasileño, afirmó este viernes (8) que no le corresponde a las embajadas de países extranjeros en Brasil monitorear la actuación de los magistrados del Tribunal

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Embajada de EEUU en Brasilia - © Luis Dantas/Divulgación

El Ministerio de Relaciones Exteriores (MRE) de Brasil citó al encargado de negocios de la Embajada de Estados Unidos (EE.UU.), Gabriel Escobar, para que brinde explicaciones sobre las amenazas realizadas por el gobierno de Donald Trump contra “aliados de [Alexandre de] Moraes en el Poder Judicial”.

El secretario interino para Europa y América del Norte del Ministerio de Relaciones Exteriores  embajador Flavio Celio Goldman, se reunió con el representante de la administración Trump en Brasil para expresar la indignación del gobierno brasileño con el tono y el contenido de publicaciones recientes del Departamento de Estado y la embajada en las redes sociales.

El gobierno entiende que las declaraciones de los órganos estatales norteamericanos representan una clara interferencia en los asuntos internos y son amenazas inaceptables para las autoridades brasileñas.

El Departamento de Estado de Estados Unidos, un organismo similar a un Ministerio de Relaciones Exteriores, ha utilizado las redes sociales para atacar decisiones del Supremo Tribunal Federal (STF) y del juez Alexandre de Moraes respecto al expresidente Jair Bolsonaro y sus aliados.

El ministro Moraes es el principal artífice de la censura y la persecución contra Bolsonaro y sus partidarios. Sus flagrantes violaciones de derechos humanos han resultado en sanciones bajo la Ley Magnitsky, ordenada por el presidente Trump. Se advierte a los aliados de Moraes en el Poder Judicial y en otros ámbitos que no apoyen ni faciliten su conducta. Estamos monitoreando la situación de cerca.

El 30 de julio, EE.UU. aplicó sanciones económicas contra Alexandre de Moraes, previstas en la llamada Ley Magnitsky, como castigo por el juicio por complot golpista, que investiga un presunto intento de golpe de Estado en Brasil después de las elecciones de 2022, que incluiría planes para arrestar y asesinar a funcionarios públicos, según Moraes.

El jueves (7), la Embajada de Estados Unidos en Brasil publicó un comentario del Secretario de Diplomacia Pública, Darren Beattie, que Brasil entiende como amenaza a los funcionarios judiciales brasileños que colaboran con Moraes. “Se advierte a los aliados de Moraes en el poder judicial y en otros ámbitos que no apoyen ni faciliten su conducta. Estamos monitoreando la situación de cerca”, decía el comunicado del diplomático, acusando al ministro de “censura” y “persecución” contra Bolsonaro, según informa la Agencia Brasil.

El ministro comunista del STF, Flávio Dino, responde a EEUU y afirma que no le corresponde a las embajadas supervisar la justicia

El ministro Flávio Dino, del Supremo Tribunal Federal (STF) y a la vez miembro del Partido Comunista de Brasil, afirmó este viernes (8) que no le corresponde a las embajadas de países extranjeros en Brasil monitorear la actuación de los magistrados del Tribunal.

La reacción del ministro se publicó en redes sociales después de que la Embajada de Estados Unidos publicara una nota el jueves (7) dirigida al ministro Alexandre de Moraes y a quienes lo apoyaban. Además, la representación diplomática de EEUU afirmó que está monitoreando de cerca la situación.

El mensaje fue divulgado después de que el expresidente Jair Bolsonaro fuera puesto bajo arresto domiciliario por Moraes , tras sucesivos incumplimientos de las medidas cautelares definidas por el ministro.

Dino afirmó que, según el derecho internacional, las embajadas no tienen autoridad para supervisar a los jueces ni a ningún ciudadano brasileño.

“Quiero recordarles que, según el derecho internacional, no es competencia de la embajada de ningún país extranjero asesorar o supervisar lo que debe hacer un juez del Supremo Tribunal Federal o de cualquier otro tribunal brasileño”, afirmó el ministro, quien también defendió la soberanía del país.

El respeto a la soberanía nacional, la moderación, el sentido común y las buenas costumbres son requisitos fundamentales en la diplomacia. Espero que el diálogo y las relaciones amistosas entre naciones que históricamente han sido socias en materia comercial, cultural e institucional vuelvan a prevalecer. Esto es lo mejor para todos, añadió, el magistrado comunista.