La hija de Alberto Cajamarca, actor y concejal alterno de Revolución Ciudadana (RC), el partido del fugado expresidente Rafael Correa, fue secuestrada junto a dos personas al salir de su trabajo en el sector Kennedy Norte, en el norte de Guayaquil. El secuestro ocurrió alrededor de las 17:00 del 22 de agosto, cuando los delincuentes interceptaron a las víctimas usando dos taxis. Pero la rápida acción policial permitió, tres horas después, que agentes de la Unidad Antisecuestros y Extorsión (Unase) las rescataran sanas y salvas y a la vez capturar a tres sospechosos.
La acción de los criminales no es un hecho aislado y la permisividad del accionar delictivo, no es de ahora, también se verifica en los anteriores gobiernos del exmandatario Rafael Correa, que no logró frenar a la delincuencia, explican analistas.
El hecho se habría registrado aproximadamente a las 18h00 del viernes 22 de agosto, en el sector Panorama, donde se conoció del presunto secuestro de dos ciudadanos. Horas más tarde, los familiares de las víctimas recibieron mensajes extorsivos en los cuales se exigía una suma de dinero a cambio de su liberación.
Tras realizar varias diligencias investigativas, la Policía Nacional del Ecuador ejecutó un operativo que permitió identificar tres ciudadanos presuntamente vinculados al delito:
Nombres de los aprehendidos:
- Diodre J. (34 años) (antecedentes por robo, extorsión, daños materiales, delincuencia organizada, estafa).
- Carlos M. (30 años) (robo, falsificación de documentos, entre otros).
- Jonathan M. (23 años), sin antecedentes.
Entre los indicios levantados durante el operativo constan dos vehículos y tres teléfonos celulares, los cuales serán sometidos a los respectivos análisis técnicos y periciales, con el fin de obtener elementos que permitan fortalecer el proceso investigativo.
El padre de la víctima, el actor y concejal correísta Alberto Cajamarca, escribió en sus redes sociales:
Pocas horas después, Cajamarca, agradeció a la policía ecuatoriana por su rápida acción que en menos de tres horas rescató a su hija.
La herencia correísta
El aumento de la criminalidad en Ecuador se vio durante los gobiernos del hoy fugado Rafael Correa (2007 – 2017). Según consigna La Data, un informe revela que durante el mandato de Rafael Correa se manipularon las cifras de homicidios, ocultando al menos 7.000 crímenes. El investigador Arduino Tomasi señala que el correísmo maquilló los datos para aparentar un país seguro, mientras la violencia, el tráfico de menores y las desapariciones aumentaban. Este engaño permitió sostener un discurso falso de seguridad, afectando a miles de víctimas cuyas muertes nunca fueron registradas correctamente. Hoy, la verdad sale a la luz, exponiendo una década de encubrimiento.
Lucio Gutiérrez, expresidente de Ecuador (2003 – 2005) y asambleísta, asegura que la situación actual es producto “una gerencia de la política a favor de la delincuencia internacional y carteles de la droga” que promovió el exmandatario, Rafael Correa.
“No renovó el convenio para que, desde la base ecuatoriana de Manta, los Estados Unidos, con tecnología, nos ayuden a combatir a los carteles de la droga. Rafael Correa aprobó la tabla de consumo de drogas en el Ecuador y dejó en libertad a más de 2.000 personas que estaban presas por micro narcotráfico. Es decir, tuvo toda una política a favor de estos movimientos de delincuencia y de droga en el mundo”, dijo el expresidente Gutiérrez a DIARIO LAS AMÉRICAS.
Denunció, además, que durante estos años el gobierno de Correa llegó a acuerdos con grupos criminales para que “operen libremente”, por lo que en esa época no se registraban conflictos armados como los que se viven actualmente.