“Dos cosas son infinitas: la estupidez humana y el universo; y no estoy seguro de lo segundo” – Albert Einstein.-
Por Paco Tilla.-
El nivel de lavado de cerebros, propio de una secta, demuestra que la fragilidad de algunos cerebros es semilla fértil en personas con claras carencias mentales que fueron manipuladas y principalmente abusadas por supuestos personajes nefastos que los dirigen a su antojo para lograr sus fines, pero a los captados no le importa y piden más; quieren ser flagelados y ni un exorcismo los salva. Como decía un humorista argentino: “Pegame y llamame Marta”.
Ya lo vimos en grupos sectarios a lo largo y ancho del mundo, cuando los falsos líderes dominan a otros seres humanos contando con la fragilidad mental de los acólitos seguidores- en este caso- la jefa de la secta; Cristina Kirchner.
En el balcón del edificio del barrio de Constitución en Buenos Aires, la presidiaria, en su cárcel de lujo, saluda a los fieles que desafían el frío de un invierno feroz que azota al Río de la Plata y en el fondo debe reírse de tener tantos serviles que rezan por ella, a pesar de que los dejó desnudos y en la pobreza, mientras ella y sus cómplices se enriquecían con el dinero del pueblo argentino.
Y sí, rezan por la corrupta en un estado de delirio incomprensible que demuestra claramente que la estupidez humana no tiene límites.
LOCURA!!! Los kukas desciendieron a la locura total y ahora le rezan a Cristina Kirchner. Después dicen que ellos son los normales. Nunca vi semejante retraso mental. Los kirchneristas están todos mal de la cabeza pic.twitter.com/u97KpQejCU
— INDIGNADO (@indignadoxd) July 26, 2025
Los kukas hicieron un santuario a Eva Perón debajo de la casa de Cristina.
¿El kichnerimo, Peronismo, kukismo o como lo quieran llamar es una enfermedad mental incurable que te deja pelotudo para siempre? pic.twitter.com/Bq6cVefLQx
— INDIGNADO (@indignadoxd) July 26, 2025