Durante la madrugada de este viernes, un nuevo grupo de ciudadanos chilenos deportados desde Estados Unidos arribó al Aeropuerto Internacional Arturo Merino Benítez, en la ciudad de Santiago, Región Metropolitana. Se trata del segundo vuelo de estas características en menos de un mes.
La aeronave, identificada como vuelo TYS45 y operada por la empresa GlobalX, despegó el jueves desde Alexandria, Luisiana, realizando escala en Lima, antes de aterrizar en suelo chileno alrededor de las 00:30 horas.
Según información preliminar, 43 personas viajaban a bordo, todas ellas bajo custodia de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos. La mayoría de los deportados habrían infringido las normas migratorias estadounidenses, particularmente el programa Visa Waiver, que permite a ciudadanos chilenos ingresar al país norteamericano sin visado por un período máximo de 90 días.
Además, trascendió que entre los expulsados figuran personas acusadas de delitos o faltas cometidas durante su permanencia en territorio estadounidense, aunque las autoridades no han detallado cuántos casos corresponden a esta categoría.
Desde el Gobierno chileno aclararon que estas expulsiones no constituyen una medida dirigida exclusivamente contra ciudadanos chilenos, sino que se enmarcan en una política migratoria más estricta impulsada por la administración del presidente Donald Trump, la cual continúa vigente en ciertas áreas bajo criterios federales.