EDITORIAL.-
Quiero advertir a los lectores que en este artículo no voy a escatimar conceptos sobre el cobarde que gobierna con mano dura a Venezuela desde el palacio de Miraflores.
Nicolás Maduro está acorralado y quienes lo asesoran, los servicios de inteligencia de Cuba, junto al Foro de São Paulo, le recomiendan que aumente la represión y las detenciones de venezolanos y ciudadanos extranjeros.
El dictador salió a dar una versión insostenible, que si no fuera trágica, parecería una broma del psicópata chavista. Como pésimo actor que es, en una presentación por televisión “denunció” que el gendarme argentino secuestrado por el régimen había llegado a Caracas para asesinar a la vicepresidenta Delcy “Cacatúa” Rodríguez; desde luego que no presentó pruebas, solo se limitó a “explicar” que detrás de esta operación estaba el gobierno de Argentina.
Pero es tanto el miedo del tirano, que envió a sus secuaces a secuestrar al yerno del verdadero presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia, en momentos en que llevaba a sus hijos a la escuela.
Este miserable, acompañado por sus laderos dentro del país y algunos políticos serviles del exterior, intenta seguir ilegalmente en el poder
Diosdado Cabello, Delcy Rodríguez “La cacatúa”, Jorge Rodríguez, Elvis Amoroso, Vladimir Padrino López, Yván Gil, Daniel Ortega, Tarek William Saab, José Luis Rodríguez Zapatero, Evo Morales, Rafael Correa y Ernesto Samper, son los rostros de la mentira
Entonces, es el momento de que las democracias del mundo trabajen en conjunto para para detener al demente que ha destrozado al país caribeño.
Es ahora, no se puede perder más tiempo…
