La ultraizquierdista Isa Serra, Eurodiputada del partido prochavista español Podemos, que se financia desde sus inicios con fondos multimillonarios enviados primero por Hugo Chávez y ahora por Nicolás Maduro, ha salido al cruce de las declaraciones del expresidente socialista de España, Felipe González, que ha pedido al Gobierno español de Pedro Sánchez encabece una iniciativa en Europa para que se reconozaca a Edmundo González Urrutia como presidente electo de Venezuela y que apoye el regreso al país para la toma de posesión del próximo el 10 de enero.
La diputada extremista ha dicho que Felipe González debe dejar de intervenir en favor de la “derecha más golpista de América Latina”, sin admitir que Maduro perdió las elecciones y que de asumir a la fuerza un nuevo mandato, estaría violando la Carta Magna de Venezuela.
Podemos, como formación política en España ha recibido desde sus inicios millones de euros del chavismo, a través de retribuciones económicas que llegaron a sus fundadores, Pablo Iglesias, Juan Carlos Monedero, Iñigo Errejón y Serrano Mancilla, entre otros, por supuestos trabajos de “asesoramiento” a la dictadura venezolana.
Tan grandes son los movimientos de dinero, que el fisco español investigó y descubrió que algunos de esos beneficiarios, intentaron ocultar el origen de esas millonarias “retribuciones” y finalmente tuvieron que blanquearlos y pagar los impuestos correspondientes.
Desde luego que ni Isa Serra ni Podemos, que subsisten gracias a que son asalariados del chavismo, tienen autoridad moral para exigirle a Felipe González, que ha sido un demócrata a lo largo de toda su vida, que no defienda sus principios; algo que el partido prochavista nunca tuvo.
Y tendrán que defender a la dictadura chavista para que no se les corte el financiamiento desde Caracas.