El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, ha accedido a una de las condiciones que la formación proetarra Bildu impuso para brindar su apoyo al Gobierno de Navarra de la socialista María Chivite, que era expulsar de esa comunidad a la Guardia Civil y transferir las competencias por completo a la Comunidad Foral, según se puede leer en el Boletín Oficial del Estado publicado el pasado viernes, que el gobierno del PSOE trató de ocultar.
El texto de esa ley orgánica, firmado por Pedro Sánchez, busca “integrar en el Régimen Foral de Navarra todas aquellas facultades y competencias compatibles con la unidad constitucional y garantizar todas aquellas facultades y competencias propias del Régimen Foral de Navarra”.
Un artículo del acuerdo con los proetarras, expresa: “corresponden a Navarra en materia de tráfico, circulación de vehículos a motor y seguridad vial, en virtud de su régimen foral y de lo dispuesto en esta ley orgánica, además de las facultades y competencias que viene ostentando, la competencia para la ejecución de la legislación del Estado, así como las funciones de vigilancia y control del tráfico”.
Así, desaparece la Guardia Civil y la Policía Foral del gobierno izquierdista de Navarra quien tendrá la competencia exclusiva para vigilar las carreteras de la región.
