El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, salió del recinto donde se celebraba la cumbre del Mercosur, en un día transcendente para el bloque regional, con la firma del acuerdo de asociación con la Unión Europea.
Lula se levantó de la mesa donde minutos antes dio su discurso y se retiró de la sala, en momentos en que el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, hacía el traspaso de la presidencia pro tempore del Mercosur al mandatario argentino, Javier Milei.
Claramente su intempestiva salida, se debería a no escuchar el discurso final de Milei.
Finalizado el acto, se anunció que los mandatarios y representantes de los países irían a la sala de prensa, para realizar la “foto de familia” y todos se dirigieron al lugar indicado, menos el presidente de Brasil.
Lacalle Pou dijo, “pero Lula se fue” y solo se quedó el canciller Mauro Vieira.
Una descortesía del brasileño que no pasó desapercibida por las autoridades de los distintos países y delegaciones invitadas.
Indudablemente que a Lula no le gustó que Milei como presidente pro tempore del Mercosur, pronunció un discurso muy duro, similar al que había dado durante la mañana, rechazando el proteccionismo del bloque regional y abogando por reformas que les permitan a los estados parte hacer acuerdos comerciales con otros países.
La posición del presidente de Paraguay
Por otro lado el presidente de Paraguay Santiago Peña se mostró nuevamente obsecuente con Lula y se manifestó en contra de la postura de Milei y Lacalle Pou de firmar acuerdos con otros países al margen del bloque, sin embargo Paraguay y Taiwán tienen un Acuerdo de Cooperación Económica (ACE) que incluye un TLC, por fuera del bloque del Mercosur.
Un claro doble discurso del mandatario paraguayo, según analistas.
