Una polémica jueza federal de 87 años, María Servini, (cumplirá 88 en diciembre próximo), se niega a jubilarse y muchos dudan de la claridad de sus fallos por la avanzada edad, ha vuelto a ser funcional al peronismo al que siempre estuvo ligada.
La jueza María Servini, que está en el cargo desde 1990 y nombrada por el expresidente peronista Carlos Saúl Menem, rechazó este viernes la solicitud del gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, de posponer las elecciones internas del Partido Justicialista (PJ) luego de que su lista fuera rechazada por no cumplir con los avales necesarios para postularse. En su fallo, con competencia electoral, la magistrada validó únicamente la lista Primero la Patria, que postula a Cristina Kirchner como candidata para liderar el PJ a partir del 17 de noviembre.
Entonces, la condenada por corrupción y que está inhabilitada de por vida para ejercer cargos públicos, queda como única candidata para presidir al Partido Justicialista (PJ).
Según informa el diario argentino La Nación, la casi nonagenaria jueza Servini, tiene una conexión con el peronismo desde antes de llegar a ser jueza federal, ya que cuando era defensora oficial, le tocó asistir a Isabel Perón. En febrero de 1976, poco antes de ser derrocada por los militares, Isabel Perón firmó su ascenso a jueza de menores. Su último trabajo como defensora oficial fue representarla.
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— INDIGNADO (@indignadoxd) November 2, 2024
