Uruguay: ¿Quién está detrás de los adolescentes que convocan a enfrentamientos violentos?

Como ocurrió en Chile y Colombia, las acciones del Foro de São Paulo  se centralizan ahora en Uruguay, que es el próximo gobierno en la mira, previo a las elecciones presidenciales de 2024

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Captura de pantalla de Twitter

EDITORIAL.-

Un nuevo fenómeno comienza a conocerse en Uruguay; grupos de adolescentes son convocados a través de las redes sociales a concentrarse frente a grandes superficies comerciales y enfrentarse a los golpes en forma ultraviolenta, en grupos conformados para dirimir -supuestamente- la supremacia de unos sobre otros.

Días pasados, las bandas de estos adolescentes se enfrentaron frente al Nuevocentro Shopping en Montevideo, pero los servicios de inteligencia de la policía habían detectado previamente esta convocatoria y los esperaban para evitar los incidentes. Allí los menores fueron controlados tras una serie de refriegas y se detuvo a varios. Luego  – según informó el diario El País – la Justicia, a solicitud de la fiscal de Adolescentes Mirna Busich, condenó a 13 de los adolescentes que participaron de la pelea masiva en las inmediaciones del Nuevocentro Shopping el pasado domingo.

El director de Comunicación de Fiscalía, Javier Benech, informó que en una primera parte de la audiencia se logró en proceso abreviado la condena de 12 jóvenes. Entre ellos se condenó a dos mujeres por riña calificada lesiones, atentado agravado y desacato agravado. El resto fue condenado por riña calificada. Todos deberán cumplir con libertad asistida, tareas de estudio y/o trabajo que se coordinan con el Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa).

Desde luego que hay alguien que utiliza a estos menores de edad para sus fines como veremos más adelante en este artículo.

La policía detuvo a Joel, un mayor de edad que incentivaba la violencia de los adolescentes

La Policía detuvo al mayor de edad identificado como Joel, que aparece en una especie de entrevista difundida en redes sociales alentando las peleas entre adolescentes como la que se organizó el pasado domingo frente al Nuevocentro Shopping.

La entrevista a Joel

“¿Vos tenés una bandita que se pelea con otra bandita y hacen farándula en las puertas de los shoppings?”, pregunta quien filma el video. “Sí”, confirma el joven. “¿Y qué beneficios sacás de eso?”, le repregunta. “Viseras, championes, chaquetitas de Zara”, que roban en sus duelos contra las presuntas bandas rivales.

Consultado por el motivo que generó que su amigo el Chepe le pegara a Dante, Joel responde: “porque es un gil”. “Son giles los del Cerrito. Nosotros somos la banda del Chepe, somos de todos lados”, agrega.

“Nos vamos a matar a palos. Más firme, les vamos a dar un pistolazo”, retruca. “Pero vos sos mayor de edad, vas a ir preso”, apunta quien hace la entrevista y Joel asegura que no le importa ir preso.

“¿De donde salieron estos malandras?”

La periodista Patricia Madrid, preguntó en su programa de radio Carve: “¿De dónde salen estos malandras?” y acotó, “Porque son unos malandras. Honestamente no cabe otra definición para decirles. Son unos malandras”, añadió.

“Que agarren a los padres de una buena vez por todas -pidió Madrid- A los chiquilines que lo manden a rehabilitarse un tiempito, pero a los padres que los manden o bien presos o que los manden a hacer tareas de rehabilitación y un taller de maternidad y paternidad”, sugirió.

“Estos chiquilines no salieron de un repollo y miren que eran unas cuantas decenas. Hay que empezar a hacer responsable a los padres”, exigió la periodista.

“Esta gente está toda mal. Hay que estar muy mal de la cabeza para pensar que las cosas se solucionan agarrándose a las trompadas con un otro”, prosiguió. “Lo que pasó ayer es inadmisible”, aseveró Madrid.

¿Quien incentiva las acciones de estos jóvenes que no sabrían que están siendo utilizados?

Como ocurrió en Chile y Colombia, las acciones del Foro de São Paulo  se centralizan ahora en Uruguay, que es el próximo gobierno en la mira, previo a las elecciones presidenciales de 2024.

El Foro de Sao Paulo ha sido acusado de ser “un instrumento de la izquierda para desestabilizar las democracias de América Latina”.

Ya han anunciado otra convocatoria para un nuevo enfrentamiento violento entre las bandas de adolescentes. ¿Quién los incentiva, busca generar un mártir entre los jóvenes cuándo se enfrentan a la policía y generar la indignación?

Para entender como actúa el Foro de São Paulo, conviene recordar cuales son las premisas de esta organización izquierdista, fundado por el Partido de los Trabajadores de Brasil en São Paulo en el año 1990, bajo la convocatoria de Lula Da Silva y Fidel Castro, entre otros.

El Foro de São Paulo tiene -entre sus cometidos- la toma de todas las instituciones y lo expone claramente en el Documento base del XXIII Encuentro del Foro de São Paulo desarrollado en Managua en 2017, donde dice textualmente:

“La izquierda debe proponerse la toma de todas las instituciones y no solamente la presidencia o las diputaciones. Es importantísimo la toma del poder judicial, los aparatos militares y los medios de comunicación.  La izquierda debe aprovechar las jornadas electorales como tribuna para denunciar a la derecha y posicionar su proyecto. Utilizando no solamente lo que pasa en cada país, sino lo que pasa en el resto del mundo, ya sea a nuestro favor o cuestionando al imperialismo”.
Luego, el manifiesto del Foro de São Paulo agrega: “La izquierda debe proponerse tomar todos los espacios posibles de radio, prensa y televisión, aunque sea a nivel de programas pagados para erosionar a los partidos de derecha y propagandear nuestro proyecto, a nivel local, nacional e internacional, entendiendo que todo ciudadano, independientemente de sus posiciones políticas, es objeto y sujeto de nuestra atención y para los cuáles siempre tiene que haber un discurso, de lo contrario seguiremos perdiendo el tiempo dirigiéndonos solamente a los sectores convencidos y desde una posición más sectaria que educativa”.

LEA: Memoria del XXIII Encuentro del Foro de São Paulo – Managua, Nicaragua – 15 al 19 de julio de 2017

Está película, con violencia generada previamente a las elecciones en Chile y Colombia, ya la vimos. No debe repetirse.