Por Paco Tilla.-
La forma de pensar de los argentinos no puede haber cambiado de un ciclo a otro, opinan analistas del programa Gran Hermano de Argentina. En el anterior primaban los buenos ejemplos y se votaba a los mejores para que continuaran en la casa. Hoy, increiblemente, se premia la violencia, el juego sucio, los insultos, la agresividad en medio de un clima enrarecido y difícil de creer.
Hoy ganan los malos, los que peor juegan y vaya uno a saber el por qué. En la actual edición se perdona la agresividad y los violentos como nunca antes y en esto, muchos concuerdan, que se debe al rating.
Para muchos internautas que la hija de la conflictiva Virginia, ganara la casa, ha sido como un golpe en la cara a los televidentes, que estallaron en las redes sociales.
La eliminación de Facundo, con enorme humanidad, no resulta creíble para muchos seguidores del programa y las acusaciones de “acomodo”, inundaron las redes.
https://twitter.com/katkatocean/status/1795655759839039713
https://twitter.com/rocki0613/status/1795655728658808929
