
Las ventas minoristas pymes de Argentina siguen en retracción. En marzo, bajaron 12,6% anual frente al mismo mes del año pasado, a precios constantes, y acumulan una caída de 22,1% en el primer trimestre del año. En la comparación mensual, disminuyeron 3,2%, según un informe que dio a conocer este domingo la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Los comercios están atravesando meses delicados, con pocas ventas y subas de costos. Especialmente en marzo fue notorio el incremento de precios en los servicios públicos. Aquellos locales más intensivos en el uso de energía, por ejemplo, como alimentos y bebidas, vieron saltar las cifras en sus boletas de luz.
A su vez, las familias vienen cuidando fuertemente sus gastos incluso cuando hay opciones de pagos con tarjetas o en cuotas. Hay incertidumbre sobre cuánto durará la recesión y por eso prevalece la precaución al momento de comprar.
En el análisis por rubro, seis de los siete sectores evaluados tuvieron disminuciones en comparación con el mismo período del año anterior. Solo el sector de textiles e indumentaria, con liquidaciones muy agresivas, escapó a la tendencia general.
Así surge del Índice de Ventas Minoristas Pymes de la Confederación Argentina de la en Mediana Empresa (CAME), elaborado en base a un relevamiento mensual entre 1.350 comercios minoristas del país, realizado del 3 y 5 de abril.
Análisis sectorial
En marzo, seis de los siete rubros registraron caídas interanuales en sus ventas. La mayor retracción anual se detectó en Perfumerías (-27,5%) y el único incremento estuvo en Textil e indumentaria (+10,2%).
Alimentos y bebidas:
Las ventas bajaron 15,5% anual en marzo, a precios constantes y acumulan una caída de 28,7% en los primeros tres meses del año frente al mismo periodo de 2023. En la comparación intermensual, bajaron 2,7%. Si bien los comercios señalan que se vendió poco y mal, su principal preocupación fue por el incremento en los costos fijos, especialmente en las boletas de luz, gas y también en los alquileres. Muchos comercios recompusieron precios que venían atrasados y en los segmentos medios, eso desplazó ventas hacia los hipermercados con mejores promociones. Empresarios consultados marcaron faltantes de lácteos, yerbas y azúcar.
“Marzo debería haber sido mejor que febrero y fue peor, mucho peor, es el indicador que ilustra al detalle lo mal que nos fue” (Comercio de Godoy Cruz, Mendoza).
“Estamos en un punto insostenible, o revierten las ventas o cerramos” (Comercio de San Salvador de Jujuy).
Bazar, decoración, textiles para el hogar y muebles
Las ventas bajaron 17,7% anual en marzo, a precios constantes y acumulan una caída de 20,3% en los primeros tres meses del año frente al mismo periodo de 2023. En la comparación intermensual bajaron 6,7%. Se vendió muy poco, solo artículos de bajo valor o algunas cosas necesarias para reposición en los hogares. Lo mejor del rubro pasó por textil de cama, como sábanas, acolchados, almohadas, toallas, donde los comercios reportaron mejores números. En decoración y muebles, algunos empresarios manifestaron sorpresa por los bajísimos niveles de consultas de la gente.
“Para entender lo que estamos pasando, en marzo no repusimos mercadería porque no vendimos casi nada” (comercio de la Ciudad de Buenos Aires).
“Las ventas que tuvimos estuvieron asociadas a gente que no renovó alquileres y se mudó, entonces compró algo, pero solo cosas muy básicas” (comercio de la ciudad de Formosa).
Textil e indumentaria
Las ventas subieron 10,2% anual en marzo, a precios constantes y llevan un incremento de 4,9% en los primeros tres meses del 2024, comparados a los del año pasado. Pero, en el contraste intermensual, bajaron 0,4%. El inicio del ciclo lectivo reactivó a las tiendas orientadas a ese rubro. Sin embargo, lo que más marcó diferencias en el sector, fue cierto congelamiento de precios y descuentos de altísimo impacto. De todos modos, hay que tener en cuenta que marzo del año pasado fue un mes malo para este ramo, el descenso había sido del 10,1% con respecto al 2022. Por otra parte, hay temor en los locales de ciudades de frontera, especialmente con Chile, porque el tipo de cambio favorece a e los trasandinos.
“Nuestro comercio tiene un nivel bajísimo de ventas desde hace ya varios meses, situación usual entre los comercios de rubro textil, pero contra el año pasado mejoramos porque nos había ido muy mal” (comercio de Río Gallegos en Santa Cruz)
“Febrero parecía repuntar pero en marzo se volvió a caer, está muy difícil para nosotros” (San Rafael, Provincia de Mendoza).
Lea en este enlace el informe completo