El Supremo Tribunal Federal (STF) decidió este miércoles (13) reconocer la licencia de maternidad a madres no embarazadas en casos de uniones estables entre personas del mismo sexo.
La decisión aplica al caso de un servidor público que utilizó el método de inseminación artificial.
La Corte juzgó el caso de una empleada municipal de São Bernardo do Campo (SP) que solicitó 120 días de licencia de maternidad por el nacimiento de un niño creado mediante inseminación artificial heteróloga (con óvulo de madre no embarazada).
A pesar de acreditar el nacimiento del niño, la licencia fue denegada por la administración pública por falta de disposición legal.
Insatisfecho con la negativa, el empleado apeló ante el tribunal de São Paulo y obtuvo el derecho a la licencia. Sin embargo, el municipio de São Bernardo también apeló la decisión ante el Tribunal Supremo.
La decisión del STF será válida para los casos de servidores públicos y trabajadores del sector privado que se encuentren en la misma situación del caso analizado.
Según la tesis que debería aplicarse a todos los procesos similares, si la madre solicita 120 días de licencia de maternidad, su pareja podrá disfrutar de cinco días de licencia, periodo equivalente a la licencia de paternidad.
Al votar sobre el tema, el ministro Luiz Fux, relator del proceso, afirmó que, a pesar de no estar expresado en la ley, la Corte Suprema debe garantizar el cumplimiento constitucional de la protección de la infancia. Para la ministra, las madres no embarazadas también tienen derecho a salir. La decisión adoptada por el STF debe ser aplicada por todos los tribunales del país.
“La licencia también pretende proteger a las madres adoptivas y a las madres no embarazadas en uniones homosexuales, que, a pesar de no experimentar los cambios típicos del embarazo, asumen todos los demás roles y tareas que les corresponden tras la formación de la nueva familia”, afirmó.
El ministro Alexandre de Moraes también reconoció el derecho a la licencia, pero se apartó del relator para asegurar que las dos mujeres de la unión estable tengan el beneficio.
“La Constitución estableció mayores permisos para las madres, contemplando la condición de la mujer. Si ambas son mujeres, ambas son madres, ¿la Corte Suprema va a decir que una puede y la otra equipara el permiso de paternidad? Estamos replicando el modelo tradicional, hombre y mujer”, concluyó. (Agencia Brasil)
Sin embargo, algunas asociaciones defensoras del matrimonio tradicional cuestionan que en el caso de una pareja de dos mujeres, terminen utilizando el semen de un hombre para quedar embarazadas y que denigren, desde su óptica, la figura masculina.