
Por Paco Tilla (el chimentero del barrio).-
Marina Calabró, es uno de esos casos donde la noble profesión periodística se ve en entredicho.
¿Quién puede tomarla en serio luego de escucharla en la mañanas con Lanata, hablando de chismes de la farándula argentina y en la noche, haciendo el papel de cronista seria en La Nación+ junto a Alfredo Leuco y Débora Plager?
¿Cuál es la verdadera? ¿La del horario matutino o la del ciclo nocturno?
Cuando intenta hacer periodismo serio derrapa por la inconsistencia de sus conceptos, habla y no concreta nada. Ahora, en el mundo de la farándula se mueve como pez en el agua. Eso hay que reconocerlo.
Junto a Leuco y Plager, se dedicó a intentar a acorralar a Jorge Macri y a Franco Rinaldi y los tres hicieron un triste papel. Me extraña en Leuco porque lo tenía en otro concepto. Plager vive en su mundo, mirando constantemente el monitor para ver como sale en cámara.
Y las redes no perdonan



















Decir que esta señora es periodista es un agravio a la noble profesión.
Comments are closed.