Ya con el 99% del voto escrutado en España, el PP obtiene 136 escaños en el Congreso de los Diputados; el PSOE, en segundo lugar consigue 122 bancas; Vox, 33; y Sumar, 31.
Ni el PP ni el PSOE han logrado la mayoría absoluta que les permita gobernar en solitario sin recurrir a los apoyos de otros partidos.
Los partidos de derechas alcanzarían 165 escaños, y el bloque de izquierdas, 156 escaños. Núñez Feijóo gana las elecciones, pero el separatista catalán Carles Puigdemont, el que se fugó de España para no ir preso por sus delitos, con su partido JuntsxCat, puede darle el triunfo a Pedro Sánchez, en esa extraña Constitución española donde no gobierna quien gana en las urnas, sino quien consigue mayores apoyos entre los partido perdedores.
Piugdemont un golpista asilado en Bélgica puede hacer presidente a Sánchez, aunque Miriam Nogueras, candidata de Junts, el partido separatista catalán, ha dicho que no apoyarán al PSOE sin una contraprestación: “No haremos presidente a Sánchez a cambio de nada”, aseguró.
Ahora se abre el tiempo de las negociaciones para formar gobierno.
Pedro Sánchez ha perdido pero con seguridad seguirá en La Moncloa con los apoyos de los separatistas catalanes y los proetarras de Bildu del País Vasco, aunque es el primer presidente de la democracia derrotado en su primer intento de reelección. Suárez, Felipe González, Aznar, Rodríguez Zapatero y Rajoy obtuvieron al menos dos victorias consecutivas.
Sánchez volverá a pactar con los partidos antiespañoles para mantenerse en el poder.
Alberto Núñez Feijóo en su mensaje en el balcón de la sede del PP en la Calle Génova de Madrid, ha expresado que su deber “es abrir el diálogo para intentar gobernar nuestro país” y ha pedido al PSOE y al resto de las fuerzas políticas “que no bloqueen el gobierno de España una vez más” y ha señalado que todos los presidentes del Gobierno de España lo han sido tras ser los más votados.
Pero Pedro Sánchez, que antes aseguraba que jamás pactaría con el populismo, dio un vuelco total y gobernó apoyado por separatistas y proetarras.
Ahora, Pedro Sánchez necesita el ‘sí’ de ERC, Bildu, BNG y PNV y que JuntsxCat del golpista Puigdemont, se abstenga para seguir siendo presidente.













