Líderes de la izquierda sudamericana manifestaron sus altas expectativas sobre la reunión de mandatarios de la región que se realizará el 30 de mayo en Brasil, especialmente por la posibilidad de que en dicha instancia se promueva la unidad regional y se instaure una reactivación del proceso de integración, entre ellas, la reactivación de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), según informa a la agencia de noticias Sputnik, el exministro chileno de Economía y Comercio Carlos Ominami de Chile, en el marco del evento llamado Coloquio Montevideo por la Integración Suramericana.
Si analizamos los logros de este bloque regional -hoy sin operativa- nos encontramos que solo ha sido, mientras funcionaba, un club ideológico de la izquierda sudamericana, sin resultados beneficiosos y donde quienes no profesan esa ideología, no han tenido voz y voto por ser parte del organismo.
En una declaración conjunta tras la finalización del coloquio de Montevideo, líderes de la izquierda suramericana aseguraron que esperan que la reunión de presidentes en Brasilia “ponga efectivamente en marcha un proceso de reactivación de la integración regional como demostración clara del compromiso con los intereses, la riqueza social y ambiental, y el protagonismo cultural plural de las sociedades de nuestra región”.
“Estaremos expectantes a los resultados de la reunión del 30 de mayo. Desde ya, comprometemos nuestro mayor esfuerzo para continuar colaborando en la construcción de una América del Sur unida, solidaria, emancipada, proactiva y fortalecida en el mundo”, agregaron.
La reunión de mandatarios en Brasilia fue convocada por Lula y tendría como objetivo un relanzamiento de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
En la misma sintonía, el excanciller y exvicepresidente uruguayo del Frente Amplio, Rodolfo Nin Novoa dijo que los Gobiernos sudamericanos deberían establecer en Brasilia una reunión anual de mandatarios para tratar los problemas más importantes de la región.
“Yo esperaría (de la reunión en Brasilia) que por lo menos se lograra un cierto consenso para tener una reunión regular de los presidentes, que se reúnan una vez por año y los cancilleres una vez cada seis meses para tener una agenda prepositiva y de resolución de problemas que pueda dar mejores condiciones de vida a los pueblos”, dijo Nin Novoa, cuyas aseveraciones no son tan importantes como para tener en cuenta.
La Unasur no tiene acciones democráticas, nunca las tuvo y solo basta tener en cuenta quienes la crearon y la impulsan: Lula, Néstor Kirchner, Hugo Chávez, Nicolás Maduro, Alberto Fernández, Rafael Correa de Ecuador y Evo Morales de Bolivia.
La multiplicidad de bloques regionales, es vasta y no se necesita que vuelva la Unasur, solo fortalecer a las que ya existen, ALADI, CELAC, MERCOSUR, entre otras.
Pero el intento de ideologizar a la región es más fuerte y eso es parte del mandato del Foro de Sao Paulo; algo que el propio Maduro viene anticipando desde 2019: “Al Foro de San Pablo le puedo decir, desde Venezuela, estamos cumpliendo el plan, va como lo hicimos, va perfecto, ustedes me entienden… Foro de San Pablo, el plan va en pleno desarrollo, victorioso. Todas las metas que nos hemos propuesto en el Foro las estamos cumpliendo una por una”, aseveró públicamente el chavista.
En definitiva y como dice el viejo refrán, “No hay peor ciego que el que no quiere ver”…
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