El alcalde de Nueva York, Eric Adams, del Partido Demócrata, que anteriormente hablaba de que su ciudad era receptiva a la llegada de inmigrantes ilegales llevados desde las fronteras de EEUU; ahora, ante la masiva llegada de extranjeros sin papeles que ya suman cerca de 70.000, pide cancelar el «derecho a alojamiento» ante la avalancha de ciudadanos de distintos países que se están recibiendo en la ciudad neoyorkina.
Adams, quiere que gobierno del presidente Biden distribuya también en otras ciudades de los Estados Unidos a los migrantes.
En medio de una crisis sin precedentes en el sistema de albergues municipales debido a la cantidad de migrantes recién llegados a la ciudad de Nueva York, el Concejo municipal aprobó la expansión del programa de cupones de alquiler de vivienda conocido como CityFheps.
Un paquete de leyes aprobado por la Cámara municipal de Nueva York, podría brindar la posibilidad a personas en albergues de acceder más rápido a viviendas permanentes, pero el alcalde deberá aprobarla para que se convierta en realidad.
Alexa Avilés, Concejal distrito 38 en Brooklyn, dijo: “Podemos responder a esta crisis de manera digna y con respeto a todos. Estamos exigiendo al alcalde que necesitamos un plan comprensivo, primero tenemos un sistema de albergue que está completamente lleno porque la situación de tener casas accequibles es muy difícil en New York City”.
Los contribuyentes son los que pagan
Las razones del alcalde Adams se centran en el costo para los contribuyentes, que se calcula sería de 17 mil millones de dólares para los próximos cinco años. Y esto reduciría los recursos ya limitados para los más necesitados y pondría en desventaja a los más de 20 mil titulares de estos cupones existentes ante la falta de unidades habitacionales vacantes. Actualmente cerca de 94 mil personas se encuentran en refugios municipales. El alcalde dijo que está revisando sus opciones.
Por su parte, los migrantes exigen viviendas
Michael Robinson, migrante venezolano, exigió: “Tiene que haber otra solución no hay otra, a la calle no nos pueden echar. Hay que seguir luchando”, explicó.