
El presidente colombiano, Gustavo Petro, exguerrillero del grupo terrorista M19, dejó afuera de la “invitación” a la conferencia sobre el proceso político en Venezuela, a países como Uruguay y Ecuador, pero si bien invitó a EEUU y Canadá, también lo hizo a países ideológicamente afines como Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, España, Honduras y México.
La intención de EEUU, Alemania, Francia, Canadá y la Unión Europea, entre otros invitados, es que vuelva la negociación entre el régimen chavista y la oposición, antes que tomar en cuenta la cuestionada exigencia de Petro de que se levanten las sanciones al gobierno de Maduro y que Venezuela regrese al Sistema Interamericano de DDHH. Estas exigencias serán difíciles de concretar, sin que antes el presidente Maduro, muestre pasos creíbles hacia la democracia, explicaron expertos.
No invitar a Uruguay y a Ecuador, tiene su explicacón, según analistas, ya que estos dos países han sido duros críticos con la falta de democracia en Venezuela.
Petro, convertido en defensor del régimen de Caracas, optó por no invitar a quienes han denunciado públicamente la situación de los presos políticos y la falta de libertades en Venezuela.












