Un hombre de 65 años recibió en Montevideo un llamado donde le dijeron que tenían a su hijo secuestrado y para liberarlo tenía que entregarles dinero.
La víctima acordó con los supuestos secuestradores dejar el dinero en una bolsa frente a una farmacia de las calles Benito Blanco y Guayaqui en el barrio de Pocitos.
Antes de entregar el dinero llamó a la Policía y alertó de lo sucedido. Equipos del Área de Investigaciones de Zona II concurrieron al lugar de encuentro y se ubicaron en puntos estratégicos para observar la situación.
A los pocos minutos vieron llegar una moto de delivery. El conductor no bajó a realizar la entrega del producto, lo que llamó la atención de los efectivos que se mantuvieron atentos a sus movimientos.
Cuando la víctima apareció con una bolsa en la mano, el motociclista subió la vereda y ahí es interceptado por la Policía.
El indagado, un ciudadano argentino de 48 años, sin antecedentes en Uruguay, fue detenido y se le incautaron dos celulares.
Con este mismo sistema ya había realizado estas estafas en Argentina.
La Justicia lo condenó como autor penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir en concurso fuera de la reiteración con un delito de estafa agravado a la pena de 10 meses de prisión.
