El ministro del Interior de Chile, Rodrigo Delgado ha informado que extenderá y profundizará la actual zanja existente, de 600 metro de longitud, establecida en la frontera con Bolivia. La medida buscará frenar la migración masiva, especialmente de ciudadanos venezolanos, que se produce en la actualidad en la zona norte del país, la cual tiene desbordada a las autoridades gubernamentales, quienes han tomado la decisión de establecer Estado de Excepción Constitucional desde el pasado 17 de febrero con el objetivo de mantener el control en el área.
En este sentido el representante de gobierno ha explicado que son aproximadamente 300 metros que se van a agregar hacia el norte de la zanja actual, que es justamente donde está el complejo fronterizo de migración, para poder tener mayor capacidad de control de bandas criminales que quieran pasar en vehículos o de personas que quieran ingresar de manera clandestina al territorio chileno.
“Es una nueva zanja que va en paralelo a la frontera con Bolivia y en paralelo también a una zanja que ya existe del lado boliviano, pero que no existía del lado chileno”, ha afirmado el ministro.
Ante esto el jefe de cartera ha detallado que la construcción ha sido intervenida por mafias y delincuentes, quienes han instalado puentes sobre el paso, al tiempo de aminorar la profundidad de la misma por lo cual se ha tomado la determinación de extenderla.
“Por los sedimentos, el paso del tiempo y también muchas veces por intervención humana justamente relacionado a bandas criminales que buscan poner algunos puentes o aminorar la zanja para pasar con sus vehículos o el tráfico de drogas, esta zanja se había mermado bastante”, ha dicho.
